28 de julio de 2022 – por: El Director.
China ha emergido con fuerza en los últimos cinco años, acompañada de Rusia y otros países. Después de todo, hay varias naciones con una población mucho mayor que la de los Estados Unidos, y no se puede decir que la hegemonía del dólar durará para siempre en este mundo. y seguramente las nuevas monedas lo pueden desplazar. Se acerca un “nuevo orden mundial”.
Mientras la Unión Soviética colapsaba y la Unión Europea luchaba por lidiar con la crisis del euro, países como Rusia, China y muchos otros están comenzando a desempeñar un papel más destacado en la economía global. No hace mucho tiempo que Europa seguía siendo la economía más poderosa del mundo. Pero cuando observa la paridad del poder adquisitivo, no es difícil ver cómo algunas naciones en desarrollo pueden volverse aún más fuertes de lo que son.
China tiene el capital y Rusia dispone de potentes armas nucleares de última tecnología y aunque la OTAN y Estados Unidos han intentado reducir su economía, no lo están consiguiendo y cada vez una amenaza nuclear no permite que la OTAN intervenga directamente en la guerra de Ucrania. Mientras que una unión de China y Rusia podría convertirse en el pináculo del “nuevo orden mundial”.
China ya es una gran potencia en Asia, pero también quiere influencia a nivel mundial. Se ha vuelto más activo en África, América Latina e incluso Europa, donde se ha convertido en uno de los mayores socios comerciales de Alemania. Su creciente poder económico significará que puede continuar con esta expansión en otras partes del mundo.
Rusia también se está volviendo más activa en el escenario mundial en su intento de recuperar su posición como superpotencia después de años de declive tras su ruptura con la Unión Soviética. Ha aumentado su gasto militar en un 50% desde 2008 y planea gastar 150.000 millones de libras esterlinas en nuevas armas durante la próxima década. Esto incluye cinco nuevos submarinos nucleares equipados con misiles hipersónicos capaces de viajar a velocidades de hasta 6000 mph, casi el doble de rápido que los misiles actuales.
Lo más importante para China es la estabilidad y la paz en su vecindad. El gobierno chino quiere la paz en sus fronteras, pero también quiere mantener el control sobre el Tíbet, Xinjiang, Taiwán y Hong Kong, para que estas áreas no se independicen o caigan en el caos como sucedió con Ucrania o Siria.
Si China quiere mantener el control sobre Taiwán o Hong Kong, entonces debe aumentar su poder militar porque si no tiene suficiente poder, Taiwán podría declarar su independencia o Hong Kong se desmoronaría en diferentes partes. Para evitar que esto suceda, China necesita un ejército fuerte capaz de defender esas regiones de cualquier ataque.
Estados Unidos y sus aliados han estado tratando de reducir la influencia de Rusia en el mundo. De hecho, han fallado. Rusia ha salido de la crisis más fuerte que nunca, con una economía fuerte, un ejército poderoso y armas nucleares de última tecnología. Rusia ha podido fortalecer su posición en Ucrania y Siria interviniendo militarmente en ambos países. Además, ha ampliado su influencia en Asia con China e India como socios en acuerdos comerciales y exportaciones de energía.
Cuando hablamos del “nuevo orden mundial”. Debemos identificar lo que pudiera esto significar pudiéramos decir que es la búsqueda de las nuevas relaciones de poder entre los actores con sus límites y oportunidades. Dos temas fundamentales: los escenarios futuros y la continuidad o cambio de naturaleza en las relaciones internacionales. Es importante conocer con propiedad que el término orden mundial que abarca analíticamente dos realidades diferentes: el medio interestatal, que se refiere a las relaciones entre Estados, y la sociedad transnacional, que comprende las relaciones establecidas y desarrolladas a través de las fronteras estatales entre los individuos y los grupos y en las que también participan (o pueden participar) actores estatales. Es claro que la condición previa para el desarrollo de la sociedad transnacional es “el consentimiento de los gobiernos de dejar que una parte de la vida económica, científica e intelectual escape a su control y se organice por sí misma, dentro y fuera, en formas relativamente autónomas. Es preciso distinguir el concepto orden mundial de las políticas de orden mundial, La política de orden mundial, en oposición a la política como de costumbre, se basa (o debería basarse) en un conjunto de principios, normas y procedimientos destinados a zanjar disputas, administrar programas, distribuir recursos y enfrentar problemas o amenazas que por su propia naturaleza no pueden ser resueltos o atacados en forma individual por ningún Estado por más poderoso que sea. Como es obvio, la política de orden mundial constituye un imperativo del orden mundial, dado que su objetivo es desplazar al medio internacional en la dirección de los sistemas políticos internos. Sin embargo, muchos piensan que nada cambiará bajo el sol del “Nuevo Orden Mundial”.
El Director
Ing. Jairo Vargas
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