Fieles reciben con fe y esperanza las reliquias de Juan Pablo II en centro de México

11 de octubre de 2024 – Morelos (México) – EFE.

Miles de feligreses recibieron con fe y esperanza las reliquias de San Juan Pablo II en el estado de Morelos, México, que ha sido afectado por un aumento de la violencia en los últimos años. Estas reliquias incluyen una gota de sangre encapsulada.

El fragmento del Santo Padre fue colocado en un nicho hecho por la comunidad católica en la parroquia de San José, en el municipio de Jiutepec, Morelos. La iniciativa de trasladar las reliquias fue de Tomasz Chlebowski, el párroco, quien es amigo del cardenal Stanislaw Dziwisz, secretario personal de Juan Pablo II.

La gota de sangre se encuentra en una escultura de aproximadamente 20 centímetros, inicialmente situada cerca del atrio para recibir la bendición del arzobispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro. Chlebowski destacó la importancia de esta reliquia como un apoyo espiritual en medio de la violencia que afecta a la comunidad.

El sacerdote considera que la reliquia será una fuente de espiritualidad y espera que su presencia traiga bendiciones de amor y paz no solo a Morelos, sino también a México y al mundo entero.

Juan Pablo II, conocido como el Papa viajero, visitó México en cinco ocasiones, la última en 2012. Marta Alicia, una devota que estuvo presente para admirar las reliquias, recordó con emoción su encuentro con el Papa, describiendo cómo ese breve momento la llenó de alegría.

Martha expresó su emoción al llegar y sentir que se estaba preparando una celebración especial. Esta conexión con el Papa la ha motivado a ser una fiel devota de San Juan Pablo II.

Durante la visita de las reliquias, el arzobispo Castro Castro pidió la intervención divina de Juan Pablo II por la paz en Ucrania, Rusia y Oriente Medio, así como en regiones de México donde la violencia es alarmante, como Sinaloa y Guanajuato.

El nicho que alberga las reliquias está protegido por tres vidrios templados y será accesible para fieles y no creyentes de todo el mundo. Actualmente, solo tres estados de México tienen una reliquia de primer grado: Puebla, Campeche y Morelos.