El huracán Harvey, convertido ahora en tormenta tropical, lleva camino de convertirse en el desastre natural más costoso de la historia de Estados Unidos, según los cálculos de la empresa de meteorología AccuWeather divulgados hoy en este país.
El coste del impacto de Harvey para la economía estadounidense se acercará a al menos 160.000 millones de dólares, indicó AccuWeather en un comunicado, al precisar que esa cifra es similar al “efecto combinado” de los huracanes Katrina (2005) y Sandy (2012).
Harvey, que entró en Texas en la noche del pasado viernes como un fuerte huracán de categoría 4, de un máximo de 5, se ha desplazado ya al este, hacia Luisiana, pero ha dejado inundaciones en Texas calificadas de “épicas” por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, además de más de 20 muertos y unos 17.000 desplazados.
“Este será el peor desastre natural de la historia estadounidense”, afirmó el fundador y presidente de AccuWeather, Joel Myers.
Según Myers, el coste, una vez que “se complete la destrucción total” de Harvey, supondrá el 0,8 por ciento del producto interior bruto (PIB) estadounidense.
“Los líderes empresariales y la Reserva Federal, los grandes bancos, las compañías aseguradoras, etc., deberían empezar a gestionar el impacto negativo que esta catástrofe tendrá en los negocios, los ingresos corporativos y el empleo”, agregó el experto.
Myers advirtió de que el desastre solo está empezando en ciertas áreas, si bien ya está claro que “partes de Houston, la cuarta ciudad más grande de Estados Unidos, serán inhabitables durante semanas y posiblemente meses debido al daño del agua”.
El presidente de AccuWeather lamentó la reacción “lenta” de las autoridades en algunos casos ante el huracán, algo que calificó de “desafortunado porque, cuando amenaza un desastre natural, los minutos y las horas cuentan”.
Pese a haberse convertido en una tormenta tropical, Harvey es el huracán más potente en llegar a Estados Unidos desde 2005, cuando el Katrina asoló Nueva Orleans, y el mayor en golpear Texas desde 1961.
La tormenta tropical Harvey se debilitó hoy sobre el suroeste de Luisiana mientras continúa dejando intensas lluvias en este estado y el extremo sureste de Texas, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
En su boletín de las 18.00 GMT, el NHC indicó que Harvey presenta vientos máximos de 40 millas por hora (65 km/h) y se encuentra a 35 millas (55 kilómetros) al nornoroeste del lago de Charles (Luisiana) y a 70 millas (110 kilómetros) al suroeste de Alexandria, también en Luisiana.
Se desplaza hacia el nor-noreste con una velocidad de 8 millas por hora (13 km/h) y se espera un “debilitamiento adicional” del sistema en las próximas 48 horas mientras se desplaza tierra adentro por Luisiana, por lo que “se degradará a depresión tropical esta noche”, precisó el NHC.
Según un probable patrón de trayectoria, el ojo de Harvey se moverá hoy a través de suroeste y centro de Luisiana y el jueves por el noroeste de Misisipi.
A pesar de ello, los meteorólogos alertan de que Harvey podría producir nuevas lluvias con acumulaciones de 3 a 6 pulgadas (de 7 a 15 centímetros) hasta el viernes desde el suroeste de Luisiana y la frontera al este de Texas hacia el oeste de Kentucky, con acumulaciones aisladas de 10 pulgadas (25 centímetros).
El otro gran peligro es el aumento del nivel del mar en las zonas costeras, debido a la marejada ciclónica y las altas olas que provocan los fuertes vientos, y en algunas zonas se esperan aumentos del nivel del mar hasta un metro de altura.
Las autoridades de Texas elevaron la cifra provisional de fallecidos por el paso del huracán Harvey a al menos 16, aunque reconocieron que probablemente el número subirá, dado que las labores de rescate y las lluvias continúan.
Según los datos recopilados por el diario “Houston Chronicle”, ocho fallecieron en el condado de Harris, que engloba a la ciudad de Houston, la más afectada por las lluvias y las inundaciones.