Trump afirma que no impondrá su plan para Gaza, pero sigue insistiendo en expulsar a los palestinos

21 de febrero de 2025 – Washington – EFE.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este viernes que no forzará su plan para la Franja de Gaza, aunque insistió en su propuesta de “sacar” a los palestinos de la región. En una entrevista con Fox News, Trump explicó que su plan es efectivo, pero no intentará imponerlo a la fuerza, sino que se limitaría a recomendarlo. Según él, bajo su plan, Estados Unidos controlaría el área, Hamás sería eliminado y se fomentaría el desarrollo.

Hace unas semanas, Trump había declarado que Estados Unidos debería encargarse de la reconstrucción de Gaza, sugiriendo que los palestinos podrían ser reubicados en otros países como Egipto o Jordania. El presidente subrayó que este sería el enfoque más efectivo, aunque también mencionó una opción alternativa, que era permitir que los palestinos se quedaran en su tierra. No obstante, descartó esta posibilidad, argumentando que Hamás seguiría presente y que exterminarlos a todos sería extremadamente difícil.

Trump continuó defendiendo su plan, explicando que consistiría en mover a los palestinos de Gaza, construir una comunidad próspera y permanente, y luego tomar control del territorio. Según el presidente, esta opción resultaría en un futuro mejor para la región, ya que Gaza no sería un lugar habitable en su estado actual.

Para Trump, la situación en Gaza es prácticamente irremediable, más allá de quitar los escombros. Él mismo calificó el lugar de “no habitable”, y sugirió que si a los palestinos se les ofreciera la opción de vivir en una comunidad decente en otro país, probablemente elegirían esa opción, aunque dijo que eso se vería con el tiempo.

El presidente destacó la ubicación de Gaza, mencionando que, en su opinión, era una zona valiosa, lo que explicaría su interés en desarrollarla. A pesar de las críticas a su plan, Trump se mostró convencido de que sería una buena solución, aunque también reconoció que sería una decisión compleja para las personas involucradas.

Cuando se le preguntó sobre la postura del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, Trump dijo que este debería tomar una decisión difícil. Planteó una disyuntiva entre preocuparse por los más de 30 rehenes que podrían estar vivos o centrarse en eliminar una organización terrorista que amenaza a Israel. Trump subrayó la gravedad de la situación, preguntándose en qué condiciones se encontrarían los rehenes.

El presidente estadounidense se mostró particularmente preocupado por el estado de los rehenes, mencionando que uno de los grupos que habían sido liberados parecía haber estado en condiciones extremas, comparándolas con un campo de concentración en Alemania. Este comentario reflejó su alarma sobre las consecuencias humanitarias del conflicto.

El proyecto de Trump para Gaza, sin embargo, no ha sido bien recibido a nivel internacional. Aunque recibió el apoyo de países como Hungría e Israel, muchas organizaciones de derechos humanos lo han criticado fuertemente, acusándolo de buscar llevar a cabo una limpieza étnica en la región. Además, la ONU le recordó que cualquier forma de deportación está prohibida por el derecho internacional.

A pesar de las críticas, Trump se mantiene firme en su postura de que su plan es una solución viable para la situación en Gaza. A lo largo de su mandato, ha defendido varias iniciativas controvertidas en temas internacionales, y en este caso no parece dispuesto a cambiar su enfoque, aunque también señaló que sería importante observar cómo se desarrollan los hechos.

En resumen, el plan de Trump para Gaza sigue generando debates, tanto dentro de Estados Unidos como en la comunidad internacional. Mientras algunos lo ven como una posible solución, otros lo consideran una violación de los derechos humanos, lo que deja abierta la pregunta sobre su viabilidad y los posibles impactos que tendría en la región.