Solo en Nueva York y su área metropolitana se han contabilizado unos 594 fallecimientos de personas de origen mexicano
19 de mayo de 2020 – Agencias.
El Gobierno de Estados Unidos registró hasta el pasado 11 de mayo 827 muertes por coronavirus de personas de origen mexicano. Organizaciones de derechos humanos han alertado reiteradamente de la vulnerabilidad y mayor exposición de los migrantes en el país y especialmente de los indocumentados, que son buena parte de los decesos confirmados.
Los mexicanos fallecidos en EEUU son casi una quinta parte del total de fallecidos en México por COVID-19, que este lunes eran 5,332, según las cifras de la Universidad Johns Hopkins.
El subsecretario de salud mexicano, Hugo López-Gatell, presentó el pasado viernes el desglose que realizó la cancillería sobre los mexicanos en el exterior que han dado positivo por coronavirus o que han fallecido por la enfermedad.
Ya el canciller Marcelo Ebrard había adelantado que el 95% de los fallecimientos por COVID-19 de mexicanos en el exterior tuvieron lugar en el país vecino. Fuera de Estados Unidos, han muerto un total de cuatro mexicanos: dos en Perú, uno en Colombia y otro en Francia.
Nueva York y su zona metropolitana, epicentro de la pandemia en el país del norte, es donde más mexicanos han muerto en el exterior por el nuevo brote, con 594 fallecimientos. Le siguen California, con 74, e Illinois, con 43.
Un dato que llama la atención es que la cifra de personas mexicanas contagiadas es menor a la de decesos. El mismo Gobierno estadounidense ha confirmado 337 casos positivos frente a las 827 muertes.
“En Estados Unidos y en prácticamente todos los países, no se sigue la misma lógica para el registro de casos que para el registro de muertes. Y no es infrecuente que sea de mejor capacidad el registro de muertes y de casos graves que el de casos leves. Es lo que hemos venido diciendo para las estadísticas en México: no es infrecuente que sea más robusta la estadística de mortalidad, dado que se requiere una certificación y un trámite, que el registro de casos”, explicó el doctor López-Gatell.
Activistas por los derechos de los migrantes en EEUU dijeron al medio mexicano Pie de Página que muchos migrantes indocumentados no quieren solicitar asistencia médica por miedo a la deportación o incluso a la norma de carga pública.