25 de junio de 2024 – Washington – EFE.
Ataviado con un traje, semblante serio y sin emitir comentarios, Julian Assange, fundador de WikiLeaks, ha llegado a la corte de las Islas Marianas del Norte, un territorio estadounidense en el océano Pacífico, donde está previsto que formalice un pacto judicial con EE.UU. que le permitirá regresar a su Australia natal.
Assange, de 52 años, arribó a la sede judicial en un vehículo blanco. Enfrente de numerosas cámaras y reporteros, descendió del automóvil vestido con un traje oscuro, camisa blanca y corbata de tono gris oscuro para entrar al edificio.
Con su cabello blanco peinado hacia atrás, no respondió a las preguntas de los medios. No obstante, al ser interrogado sobre si prefería el clima de las Islas Marianas o el de Londres, se detuvo un momento antes de proseguir sin contestar.
Dentro del tribunal, los periodistas pudieron observar cómo pasó por los controles de seguridad, depositando sus pertenencias en un recipiente de plástico para ser escaneadas por el detector de metales y recogiéndolas tras el control.
El edificio judicial, con grandes ventanales y palmeras alrededor, muestra la bandera de las Islas Marianas del Norte ondeando en uno de sus extremos. La corte se encuentra en Saipán, la isla más grande y capital de dicho territorio estadounidense en el Pacífico.
El fundador de WikiLeaks, quien llegó a Saipán alrededor de las seis de la mañana, está programado para comparecer ante un juez de ese tribunal a las 09.00 hora local del miércoles (23.00 GMT del martes) y admitir su responsabilidad en uno de los cargos que le imputa EE.UU. por la mayor filtración de documentos clasificados en la historia del país, ocurrida en 2010.
La audiencia se celebra en las Islas Marianas debido a la negativa de Assange a ser trasladado al territorio continental de Estados Unidos y a la cercanía del tribunal con Australia, según indicó una carta enviada por el Departamento de Justicia estadounidense al tribunal.
Durante la sesión judicial, se formalizará -con la aprobación del juez- el acuerdo alcanzado entre la defensa de Assange y el Departamento de Justicia de EE.UU., en el que Assange reconocerá su culpabilidad a cambio de una pena de 62 meses de prisión, tiempo que ya ha cumplido en la prisión de alta seguridad de Belmarsh en el Reino Unido.
El acuerdo incluye la concesión de crédito por el tiempo ya servido, lo que permitirá a Assange quedar en libertad tras la audiencia y partir hacia Australia, donde lo esperan su esposa Stella y sus dos hijos.