Un atacante suicida se hizo estallar durante un discurso del presidente Ashraf Ghani, que busca reelegirse en las elecciones de 2019
17 de diciembre de 2019 – EFE.
Al menos 30 personas murieron y otras 32 resultaron heridas por un atentado suicida este martes en las cercanías del recinto donde tenía lugar un mitin electoral del presidente Ashraf Ghani, en el norte de Afganistán.
“Hasta ahora hemos recibido 24 cadáveres y 32 heridos, entre las víctimas hay mujeres y niños“, afirmó a EFE el doctor Qasem Sangin, director del Hospital Provincial de Parwan, donde ocurrió el atentado, que anotó que “11 de los heridos se encuentran graves”.
Posteriormente, la cifra oficial de víctimas aumentó a 30 muertos. El atentado se produjo hacia las 12:00 h local en una de las calles principales de la capital de Parwan, Char-e-Kar, que conducía al mitin de Ghani, explicó a EFE la portavoz del gobernador provincial, Wahida Shahkar.
La portavoz, que confirmó el número de víctimas, detalló que aunque en un principio se pensó que la explosión se debió a una bomba adherida a un vehículo policial, nueva información reveló que se trató de un atacante suicida que se inmoló cuando circulaba en una motocicleta cargado de explosivos.
A pesar de la gravedad del atentado, el acto electoral para las generales que se celebrarán el próximo 28 de septiembre “prosiguió con normalidad” tras la explosión, informó a EFE un portavoz del equipo de campaña de Ghani, Jawid Faisal.
“Todos los miembros del equipo de campaña, en particular el presidente Ashraf Ghani y otros oficiales, han salido ilesos y se encuentran bien“, aclaró.
Ghani busca su reelección en estos comicios, en los que se tendrá que enfrentarse a otros 17 candidatos, entre ellos el actual jefe del Ejecutivo afgano, Abdullah Abdullah.
Ningún grupo insurgente ha reivindicado la autoría del atentado, que se produjo poco antes de otro ataque cerca de un edificio del Ministerio de Defensa afgano y la embajada estadounidense en Kabul, del que todavía se desconocen los detalles.
El pasado agosto los talibanes amenazaron con boicotear con violencia todo el proceso electoral, con el fin de impedir su celebración al considerar que está manipulado por las potencias extranjeras.
Representantes de los talibanes y Estados Unidos mantuvieron durante el último año nueve rondas de negociaciones en Doha para tratar de buscar un camino a la paz tras 18 años de guerra, unas conversaciones que fueron suspendidas este mes por el presidente estadounidense, Donald Trump, tras un atentado insurgente en Kabul.