9 de septiembre de 2024 – Los Ángeles (EE.UU.) – EFE.
Las autoridades de California llegaron a un arreglo por 5,6 millones de dólares en el caso de una mujer que sufrió una inspección ilegal en sus genitales, junto con otras humillaciones, durante una visita a su esposo en prisión.
En una conferencia de prensa virtual, la víctima, Christina Cárdenas, quien no tuvo drogas encontradas durante la requisa de septiembre de 2019, afirmó que ningún monto compensatorio puede reparar el abuso sufrido hace cinco años, y que su denuncia busca enviar un firme mensaje a los oficiales penitenciarios sobre situaciones similares.
Según el acuerdo, el Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California (CDCR) deberá pagar 3,6 millones, y la Institución Correccional de California (CCI) 2 millones de dólares.
Cárdenas subrayó la necesidad de respetar los derechos humanos de los visitantes y no tratarlos como “delincuentes”.
La abogada Gloria Allred indicó que estos ataques a una población “vulnerable” marcarán un precedente, obligando a los oficiales a seguir rigurosamente las órdenes de registro judiciales.
Los abogados denunciaron que varios oficiales y un médico se excedieron con Cárdenas, sometiéndola a un registro invasivo e ilegal que incluyó la penetración de los dedos del médico en su vagina y ano.
Describieron en detalle el proceso que incluyó desnudamiento, orden de secarse las lágrimas, y posturas incómodas, incluso estando esposada.
El acuerdo también estipula que CDCR distribuya un memorando de políticas a todos los empleados para evitar excesos en registros permitidos por la ley.