17 de octubre de 2024 – Nueva York – EFE.
El esposo de la dueña de una guardería en Nueva York fue condenado a 45 años de prisión y cinco de libertad vigilada. Esto se debe a la muerte de un niño de un año y a la intoxicación de otros tres por fentanilo almacenado de manera ilegal en las instalaciones de la guardería.
Según el tribunal, desde octubre de 2022, el condenado y otros cómplices estaban involucrados en una conspiración para distribuir narcóticos desde la guardería ubicada en el Bronx. Allí, escondían más de 11 kilogramos de fentanilo y heroína en compartimentos ocultos bajo las baldosas del área de juegos, donde los niños pasaban gran parte de su tiempo.
Este entorno peligroso culminó en la trágica muerte de un niño en septiembre de 2023. Los otros tres menores, de entre 8 meses y 2 años, tuvieron que ser hospitalizados y tratados con Narcan, un medicamento que se utiliza para contrarrestar las sobredosis por fentanilo.
El condenado, de 35 años, se declaró culpable de varios cargos, incluida la conspiración para distribuir narcóticos y posesión de drogas que causaron la muerte del niño, así como lesiones graves a los otros menores.
La dueña de la guardería y su prima, quien también está involucrada en el caso, enfrentan once cargos cada una. Estos van desde asesinato y homicidio involuntario hasta causar lesiones graves y posesión de narcóticos.
El fiscal federal, Damian Williams, resaltó la gravedad de este caso, señalando cómo ilustra la devastadora epidemia de fentanilo y el daño profundo que causa, especialmente a las personas más vulnerables.
La muerte de Nicholas Dominici, el niño fallecido, impactó a la ciudad de Nueva York, que, al igual que el resto del país, enfrenta una crisis de fentanilo. En 2023, aproximadamente 107.500 personas murieron por sobredosis relacionadas con este opioide sintético, superando en número a las bajas estadounidenses en las guerras de Vietnam, Afganistán e Irak juntas.