15 de enero de 2025 – La Habana – EFE.
El Gobierno cubano inició este miércoles el proceso de excarcelación de reclusos, tal como había anunciado el día anterior, luego de que Washington decidiera excluir a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo. Entre los excarcelados, se encuentran algunas personas que son consideradas presos políticos.
Desde las primeras horas de la mañana, diferentes presos políticos comenzaron a abandonar varias prisiones del país, aunque de manera gradual. Activistas y organizaciones no gubernamentales confirmaron la información, aunque las autoridades cubanas no han proporcionado cifras oficiales. Se estima que al menos una quincena de personas han sido liberadas hasta el momento.
Entre los liberados no figuran algunos de los presos más conocidos internacionalmente, como los opositores José Daniel Ferrer y Félix Navarro, o los artistas Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel Osorbo, quienes han sido clasificados como presos de conciencia por Amnistía Internacional. Sin embargo, sí se encuentran entre los excarcelados algunos activistas y personas condenadas por su participación en las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021.
De acuerdo con las organizaciones Justicia 11J y Prisoners Defenders, que mantienen registros detallados de los presos políticos en Cuba, todos los excarcelados hasta el momento han sido liberados bajo condiciones de “excarcelación”, y no han sido indultados ni amnistiados. Estas organizaciones han expresado su preocupación de que la excarcelación no implique la extinción total de las sanciones.
La vicepresidenta del Tribunal Supremo Popular de Cuba, Maricela Sosa, explicó que aquellos excarcelados no han sido indultados ni amnistiados, sino que se trata de un proceso de excarcelación que depende de ciertos criterios, como el cumplimiento de “buena conducta”. De no cumplir con estos requisitos, los excarcelados podrían regresar a prisión.
Según los registros de Prisoners Defenders, a finales de 2024, había un total de 1.161 presos políticos en Cuba, mientras que Justicia 11J cifra en 549 los manifestantes del 11J condenados. La excarcelación actual de 553 personas sería la primera desde 2019, cuando el gobierno cubano indultó a más de 2.600 prisioneros. La anterior excarcelación de gran escala ocurrió en 2015, cuando Cuba liberó a 3.522 reclusos como “gesto humanitario” antes de la visita del Papa Francisco.
El anuncio de la excarcelación coincidió con la decisión de Estados Unidos de sacar a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo, una designación que había sido impuesta en 2017 durante la presidencia de Donald Trump. Esta lista ha tenido implicaciones importantes para Cuba, incluyendo restricciones en el comercio de armas, control sobre sus exportaciones, limitaciones a la ayuda exterior y dificultades financieras.
El impacto de la inclusión de Cuba en esta lista, junto con otras sanciones y la pandemia, ha agravado la crisis económica en la isla. La economía cubana enfrenta una grave contracción, inflación elevada y déficit fiscal, lo que ha resultado en escasez de productos básicos como alimentos, medicinas y combustible, así como apagones prolongados. Esto ha generado un descontento social visible en una ola migratoria sin precedentes y en las protestas que se han dado desde 2021.
Washington afirmó que la excarcelación de presos en Cuba y la exclusión de la isla de la lista de países patrocinadores del terrorismo son dos aspectos de un acuerdo mediado por el Vaticano. Esta medida fue vista como un paso positivo, aunque de alcance limitado, por el ministro de Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez. Afirmó que, aunque es un avance, las sanciones aún siguen vigentes.
Rodríguez también destacó que la exclusión de Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo representa un reconocimiento por parte de Estados Unidos de que esta política es obsoleta y no contribuye a los intereses nacionales estadounidenses. Sin embargo, expresó su preocupación de que la próxima administración republicana pudiera revertir esta decisión.
Por otro lado, el designado secretario de Estado bajo la presidencia de Trump, Marco Rubio, expresó su desacuerdo con la exclusión de Cuba de la lista, afirmando que la isla aún cumple con los requisitos para estar en esa lista. También indicó que las decisiones de la administración actual no serían vinculantes para la nueva administración que asumirá el poder en unos días.