15 de julio de 2024 – Miami – EFE.
El dirigente de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), Ramón Jesurún Franco, y su hijo, Ramón Jamil, fueron detenidos por la Policía de Miami-Dade (Florida) tras un incidente que tuvo lugar en el estadio durante la final de la Copa América entre Argentina y Colombia el domingo pasado.
Jesurún, de 71 años, y su hijo, de 43, fueron apresados aparentemente después de un altercado registrado en un ascensor del estadio Hard Rock, al concluir el encuentro en el que Argentina superó 1-0 a Colombia. El partido estuvo marcado por el desorden y el caos generado por miles de aficionados sin entrada que rompieron las barreras de seguridad.
Ambos enfrentan cargos menores y deben presentarse ante el tribunal de fianzas de Miami-Dade este lunes, según registros judiciales y reportes de medios locales.
No se tienen claros los detalles sobre el arresto, aunque el medio colombiano Publimetro informa que Jesurún tuvo una disputa en el estadio durante la final.
Las autoridades de Miami-Dade están investigando los fallos que llevaron al caos, la violencia y la destrucción durante la final de la Copa América 2024, donde muchos aficionados que compraron boletos no lograron ingresar al partido del domingo y además sufrieron golpes y desmayos por las altas temperaturas.
Horas antes del inicio del encuentro, cientos de personas sin entradas rompieron los perímetros de seguridad, escalaron vallas y se saltaron los controles de acceso al recinto, lo que generó caos, estampidas y obligó al cierre de las puertas, así como al retraso en el inicio del partido.
Al menos dos personas adicionales fueron detenidas después de que una multitud de hinchas sin boletos atacara a empleados y personal de seguridad del estadio para acceder a las instalaciones, según informaron medios locales como Telemundo.
Videos compartidos en redes sociales mostraron a aficionados brincando sobre los accesos en la zona suroeste del estadio, ubicado en Miami Gardens, y corriendo para evitar ser capturados por las autoridades y el personal.
Incluso se observaron imágenes de hinchas intentando ingresar a través de los conductos de ventilación del estadio.
El Hard Rock Stadium informó este domingo en su cuenta de X que “miles de seguidores sin boletos intentaron ingresar por la fuerza al estadio (…)”, por lo que “la seguridad cerró las puertas para controlar el proceso de entrada a un ritmo mucho más lento”.
La alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, así como el jefe de la Policía local, Jaime Reyes, han declarado que la responsabilidad de lo ocurrido recae en la Conmebol, la entidad organizadora del fútbol en América del Sur.
“La Copa América es organizada por CONMEBOL y la Policía de Miami-Dade brinda apoyo”, explicó la alcaldesa.