12 de febrero de 2018 – Agencias.
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, ha asegurado este domingo que Washington está dispuesto a mantener conversaciones con Corea del Norte, si bien ha recalcado que mantendrá “la máxima presión” sobre Pyongyang.
En declaraciones a The Washington Post, Pence ha indicado que ha acordado en sus conversaciones con el presidente surcoreano, Moon Jae-in, los términos de nuevos contactos con Corea del Norte, que estarán encabezados por Seúl.
“La clave es que no se rebajará la presión hasta que (Corea del Norte) haga algo que la alianza considere que representa un paso significativo hacia la desnuclearización”, ha manifestado.
No hay distensión
“La campaña de máxima presión va a continuar y se va a intensificar, pero si quieren hablar, hablaremos”, ha sostenido durante su viaje de vuelta tras presenciar la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno de PyeongChang.
Las palabras de Pence llegan después de las últimas diferencias entre Washington y Seúl en torno al acercamiento de Corea del Sur con Pyeongyang para preparar su participación en los Juegos Olímpicos.
En este sentido, Moon habría asegurado al vicepresidente estadounidense que comunicará a Corea del Norte que no habrá una retirada de sanciones únicamente por mantener conversaciones.
Este mismo domingo, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, ha estimado que todavía es demasiado pronto para hablar de una distensión diplomática entre las dos Coreas, insistiendo en que el acercamiento no implica en absoluto una brecha en las relaciones entre Washington y Seúl.