Los inmigrantes, en su inmensa mayoría africanos, se habían ido instalando durante meses en tiendas de campaña debajo de las autopistas del periférico que rodea París
30 de mayo de 2018 – EFE.
La policía francesa evacuó hoy el campamento de inmigrantes más grande que se había constituido en París, con más de 1.500 personas, la operación número 34 de este tipo que se lleva a cabo en la ciudad desde junio de 2015.
Los inmigrantes, en su inmensa mayoría africanos, se habían ido instalando durante meses en tiendas de campaña debajo de las autopistas del periférico que rodea París junto al canal de Saint Denis, en las proximidades de la Puerta de la Villette.
Deben ser realojados en una veintena de centros de acogida en la capital y en su región, explicó el Ministerio del Interior.
En un comunicado, el Ministerio señaló que para evitar que este tipo de evacuaciones se tengan que repetir, la Prefectura de Policía actuará para impedir que vuelvan a constituirse este tipo de campamentos «utilizando si es necesario los medios jurídicos a su disposición».
La operación, que empezó poco después de las 06.00 hora local (04.00 GMT) sin incidentes, debía prolongarse al menos durante una parte de la mañana.
La inmensa mayoría de los inmigrantes se subió a los autobuses puestos a disposición por la Prefectura, aunque la emisora «France Info» puntualizó que algunos optaron por trasladarse a otros campamentos que también hay en dos puntos de la capital, en el canal de Saint Martin (donde hay unas 800 personas), y en torno a la Puerta de la Chapelle (otras 300).
A ese respecto, el prefecto de la región, Michel Cadot, avanzó a la prensa que «los otros campamentos se evacuarán en cuanto sea posible, y si es posible la semana próxima».
La evacuación de hoy se produjo después de semanas de polémica entre el titular de Interior, Gérard Collomb, y el Ayuntamiento de París, al frente del cual está Anne Hidalgo, sobre el reparto de responsabilidades por estas operaciones y por la situación de los inmigrantes.
También sobre la política de inmigración, en el contexto de la nueva ley diseñada por Collomb, que tiene el objetivo de agilizar los trámites para los demandantes de asilo, pero que endurece las posibilidades de acogida para los otros inmigrantes y prepara mecanismos para facilitar las expulsiones de los irregulares.
