15 de febrero de 2022 – Washington – EFE.
Fabricantes de automóviles han reanudado la actividad en varias de sus plantas en EE.UU. y Canadá, tras suspenderla por el bloqueo durante casi una semana del puente Ambassador, que une la ciudades canadiense de Windsor con la estadounidense Detroit, por manifestantes antivacunas.
Toyota Motor North America apuntó que está reanudando gradualmente sus operaciones, y que solo algunas líneas de producción en sus plantas de Kentucky, Alabama y Virginia Occidental, en EE.UU., no lo han hecho, aunque espera que vuelvan a la completa normalidad esta semana.
El lunes, tan solo tres de las fábricas de Toyota en Canadá estuvieron paralizadas, dijo la portavoz de la filial estadounidense de la compañía japonesa, Kelly Stefanich, en declaraciones al diario local The Detroit News.
Por su parte, Ford señaló que solo dos de sus factorías en Ohio y Misuri, también en EE.UU., están inactivas, pero que reanudarán sus operaciones en unos días.
El bloqueo del puente Ambassador, el principal cruce terrestre entre EE.UU. y Canadá, hizo que la semana pasada algunos de los principales fabricantes de automóviles a ambos lados de la frontera tuvieran que reducir o interrumpir su producción por la falta de piezas y equipos.
Según la estimaciones de la consultora Anderson Economic Group, con sede en Michigan y citada por el diario The Detroit News, las pérdidas ocasionadas por el bloqueo rondarían los 300 millones de dólares.
El domingo, la Policía detuvo a 46 personas durante el desmantelamiento del bloqueo de ese puente, por el que pasan cada día mercancías por valor de 400 millones de dólares y una de las principales rutas de la cadena de montaje automotriz.
Windsor ha declarado el estado de emergencia y mantiene una fuerte presencia policial en torno al paso fronterizo para asegurar que no vuelva a ser bloqueado por manifestantes.
Todo ello mientras este martes, se mantiene la ocupación del centro de Ottawa, capital de Canadá, por unos 400 camiones y centenares de personas, pese a que el primer ministro Justin Trudeau ha invocado poderes especiales de emergencia para sofocar la protesta y los manifestantes se enfrentan a graves penas y la confiscación de sus vehículos.