30 de octubre de 2024 – Los Ángeles – EFE.
Un mexicano que estaba bajo arresto en un controvertido centro de detención de inmigrantes en Washington falleció el domingo, según denunció la organización La Resistencia. Este es el segundo deceso en dicha instalación en lo que va del año.
El Departamento de Policía de Tacoma confirmó la muerte del inmigrante, quien se encontraba en aislamiento médico en el Centro de Detención del Noroeste (NWDC), que opera bajo el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). Aunque no se ha revelado su identidad, otros detenidos han corroborado que era mexicano.
Con este incidente, se contabiliza la cuarta muerte de un inmigrante en este centro, sumándose a los casos de José Cervantes Corona en 2006, Mergansana Amar en 2018 y Charles Leo Daniel en 2024. Daniel había estado en régimen de aislamiento durante los últimos cuatro años antes de su muerte el 7 de marzo.
El NWDC ha sido objeto de críticas por las condiciones en que se encuentran los detenidos, incluyendo el uso de aislamiento, la escasez de alimentos y ropa limpia, así como negligencia médica. Estas quejas han llevado a los activistas a exigir una investigación clara sobre las circunstancias de estos fallecimientos.
Maru Mora Villalpando, directora de La Resistencia, manifestó que las constantes denuncias son motivo suficiente para rechazar la idea de que las muertes pueden ser consideradas “naturales”. La organización ha pedido una investigación exhaustiva y transparente.
Además, La Resistencia ha estado documentando el traslado de detenidos desde los estados fronterizos del sur. Recientemente, un grupo de 48 inmigrantes fue trasladado desde Phoenix, Arizona, a este centro de detención.
Este grupo, compuesto por 32 mujeres y 16 hombres, representa el mayor número de detenidos que se ha observado desde mayo de 2023, según lo indicado en el comunicado de la organización. La situación resalta las tensiones en el sistema de inmigración y las preocupaciones sobre los derechos de los detenidos.
Las acciones de traslado y las condiciones de detención continúan siendo un punto focal de atención para los defensores de los derechos humanos, quienes insisten en la necesidad de mejorar la situación dentro de estos centros.