24 de junio de 2024 – San Antonio (EE.UU.) – EFE.
Un magistrado en Texas estableció este lunes una caución de diez millones de dólares para uno de los dos venezolanos señalados del homicidio de la niña Jocelyn Nungaray, de 12 años, cuyo cuerpo fue encontrado en un arroyo en el norte de Houston la semana pasada.
Franklin José Peña Ramos, de 26 años, fue detenido el jueves pasado y este lunes compareció por primera vez en una corte.
El juez determinó la elevada caución debido al alto riesgo de fuga del inmigrante, que ha estado bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) desde el día de su arresto.
Peña fue arrestado junto a Johan José Martínez Rangel, de 22 años, después que la Policía de Houston divulgara varias imágenes de los dos migrantes hablando con la menor.
Las autoridades creen que Nungaray salió de su hogar la noche del domingo 16 de junio sin que su madre se percatara.
Conforme a documentos judiciales, los sospechosos supuestamente atrajeron a la menor debajo de un puente, donde la retuvieron por más de dos horas, le quitaron los pantalones, la ataron y la estrangularon antes de arrojar su cuerpo al pantano, donde fue hallado la mañana del lunes.
ICE confirmó la semana pasada a los medios que Peña Ramos y Martínez Rangel fueron detenidos en la frontera recientemente por autoridades de inmigración y puestos en libertad con grilletes electrónicos y una orden para comparecer ante un tribunal de inmigración.
El deceso de Nungaray ha avivado nuevamente la retórica antiinmigrante de los republicanos y la campaña del expresidente Donald Trump (2017-2021).
Tras la detención de los sospechosos, el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, manifestó que los homicidas de menores deben recibir la pena capital, mientras arremetió nuevamente contra la Administración del presidente Joe Biden.
Se anticipa que Martínez Rangel se presente mañana en corte y se le imponga una caución similar.