30 de octubre de 2024 – Washington – EFE.
El presidente Joe Biden y la primera dama, Jill Biden, recibieron este miércoles a un grupo de niños en la Casa Blanca para celebrar su último Halloween en la residencia presidencial con la actividad de “Truco o Trato”. Este evento, que se lleva a cabo anualmente, busca fomentar la lectura entre los más jóvenes, una iniciativa impulsada por Jill.
Al igual que el año pasado, los Biden combinaron la entrega de caramelos con la distribución de libros a los niños, promoviendo así el amor por la lectura. Este año es especial, ya que Biden no se postulará para la reelección y permitirá que su vicepresidenta, Kamala Harris, asuma el liderazgo en las elecciones.
El evento, denominado ‘Hallo-Read’, tuvo lugar un día antes de Halloween en el Jardín Sur de la Casa Blanca y estuvo abierto a los hijos y nietos de empleados del gobierno, así como a familiares de militares. Fue una oportunidad para que las familias compartieran un momento festivo en un entorno emblemático.
Jill Biden, que se disfrazó de oso panda, fue la encargada de entregar los libros a los niños. Su disfraz hizo referencia a la reciente llegada de dos osos pandas al Zoológico de Washington, los primeros en 24 años procedentes de China.
Aunque Joe Biden no llevó disfraz, interactuó con entusiasmo con los niños que pasaban a su lado, mostrando cercanía y alegría en la celebración. Ambos estaban ubicados en el Pórtico Sur, esperando a que los pequeños se acercaran para recibir sus golosinas y libros.
Alrededor de ellos, músicos de la Orquesta de Cámara de la Marina tocaban melodías de series y películas, creando un ambiente festivo. Este detalle musical sumó al ambiente alegre del evento, animando a los niños y sus familias.
El escenario estaba decorado con grandes calabazas que sostenían una enredadera de libros, alineándose con la temática de la fiesta. Esta decoración se extendía hasta el balcón, donde una luna naranja destacaba con el nombre del evento.
El jardín estaba repleto de calabazas y elementos otoñales, además de juegos diseñados para el disfrute de los niños, convirtiendo la celebración en una experiencia divertida y memorable. La atmósfera era de alegría y comunidad, típica de las festividades familiares.
Finalmente, las calabazas que se usaron como decoración serán donadas a DC Central Kitchen, una organización que se dedica a reciclar comida en la ciudad y cuenta con el chef José Andrés como parte de su equipo. Esto añade un componente solidario al evento, destacando el compromiso de los Biden con la comunidad.