10 de diciembre de 2024 – La Paz – EFE.
La Armada de Bolivia presentó este martes a ‘Erizo’, un robot diseñado para ayudar en la lucha contra los incendios forestales. Su principal función es ingresar a las zonas más afectadas por los fuegos y descargar grandes cantidades de agua, reduciendo así el riesgo para los bomberos. Esta innovación se crea con la finalidad de proteger a los profesionales encargados de enfrentar los incendios, según explicó el responsable de la unidad de Innovación Tecnológica de la Armada, Adalid Alfaro.
El robot recibe su nombre del acrónimo “evento de reacción contra incendios en la zona de operaciones”, o ‘Erizo’. Fue fabricado por la Armada en respuesta a la creciente necesidad de proteger a los bomberos forestales, quienes enfrentan condiciones peligrosas durante su trabajo. Alfaro destacó que el robot es una herramienta clave para garantizar la seguridad de los equipos de emergencia.
Erizo es un robot oruga que está equipado con cuatro motores, uno en cada eje. Esta característica le permite moverse con facilidad en áreas boscosas y acceder a zonas de difícil acceso, donde otras máquinas podrían tener dificultades. La capacidad del robot para entrar en estos lugares lo convierte en un recurso valioso para combatir las llamas en situaciones extremas.
El robot tiene la capacidad de descargar una gran cantidad de agua de manera rápida. Esta agua proviene de camiones bombero, lo que le permite a Erizo ayudar a controlar los incendios en menos tiempo y con mayor efectividad. La potencia del sistema de rociado es otra de sus características destacadas, ya que permite cubrir grandes superficies rápidamente.
Además, el sistema de presión del robot le permite disparar agua a más de 50 metros de distancia. El agua se puede dispersar en forma de aspersión lineal o en forma de “nube”, lo que facilita su dispersión en amplias áreas y mejora su eficiencia al atacar las llamas. Esta versatilidad le permite adaptarse a diversas situaciones en el terreno.
Acompañando al robot, estarán camiones bomberos con capacidad para cargar hasta ocho toneladas de agua. Estos camiones serán parte de un sistema de trabajo en equipo que incluirá, además del robot, cisternas de abastecimiento de agua y contenedores logísticos para suministrar apoyo a los bomberos en el terreno. De esta manera, se conformará un sistema integral para enfrentar los incendios forestales.
El objetivo de la Armada es crear varios equipos de trabajo que incluyan estos robots, camiones de bomberos y equipos de apoyo logístico. Con ello, se espera mejorar la capacidad de respuesta ante incendios, asegurando la eficacia de las operaciones y protegiendo a los bomberos en su labor. Esta estrategia es parte de un esfuerzo por enfrentar de manera más efectiva los incendios forestales que azotan al país.
El prototipo del robot fue construido tras una directiva emitida por el gobierno boliviano a las Fuerzas Armadas. El objetivo era desarrollar una herramienta tecnológica capaz de enfrentar los incendios de manera más eficiente. Este proyecto se basa en las lecciones aprendidas de los incendios recientes que han afectado al país, y busca mejorar las capacidades de intervención de las fuerzas de emergencia.
Bolivia vivió este año uno de los peores desastres ambientales de su historia, con la pérdida de 9,8 millones de hectáreas de bosques y pastizales. Los incendios arrasaron grandes áreas de la naturaleza, lo que generó una crisis ambiental de magnitudes sin precedentes. Este desastre pone de manifiesto la urgencia de implementar medidas más efectivas para combatir los incendios forestales.
Sin embargo, organizaciones como la Fundación Tierra, dedicada al estudio del medio ambiente, estiman que el daño real podría superar los 14 millones de hectáreas. Estos cálculos se basan en estudios realizados con satélites, que revelan la extensión del desastre. Las áreas quemadas incluyen bosques, pastizales y reservas naturales, lo que ha dejado consecuencias irreversibles para la biodiversidad del país.
La pérdida de bosques, flora y fauna es una de las consecuencias más graves de estos incendios. Los expertos advierten que el impacto será difícil de revertir, afectando no solo al medio ambiente, sino también a las comunidades que dependen de estos ecosistemas. La destrucción de estas áreas representa una amenaza para la biodiversidad y el equilibrio ecológico de Bolivia.
La principal causa de los incendios en Bolivia es la práctica de las quemas o ‘chaqueos’, una técnica utilizada en el campo para preparar los terrenos para la agricultura o el pastoreo. Esta práctica, aunque común, es uno de los principales factores que contribuyen a la proliferación de incendios, especialmente en la temporada seca. La expansión de la frontera agrícola también juega un papel importante en la intensificación de los fuegos.
Los incendios forestales se han convertido en un problema recurrente en Bolivia, especialmente durante los meses de julio, agosto y septiembre. Estos incendios no solo son una amenaza para el medio ambiente, sino también para la salud de las personas y la economía del país. La implementación de tecnologías como el robot Erizo busca mitigar los efectos de estos incendios y proteger tanto a la naturaleza como a las personas involucradas en las labores de extinción.