El texto legislativo debe ser refrendado por el Senado, previsiblemente en enero, para que el nuevo tratado comercial pueda entrar en vigor
19 de diciembre de 2019 – Nueva York – Agencias.
El plenario de la Cámara de Representantes aprobó con una abrumadora mayoría el nuevo tratado que regirá las relaciones comerciales entre Estados Unidos, México y Canadá (TMEC). El texto legislativo se aprobó con el apoyo de 193 congresistas demócratas y 192 republicanos, en una decisión bipartidista que contrasta con el choque frontal que se vivió un día antes por el impeachment al presidente Donald Trump. Ahora las disposiciones del acuerdo comercial deben ser adoptadas por el Senado para que sea ratificado.
“Por fin llegó este día”, proclamó el republicano Bill Huizenga, que representa un distrito en Michigan que se beneficia de las exportaciones hacia los vecinos norteamericanos. Haley Stevens es de la misma región. El acuerdo, dijo la demócrata durante las más de tres horas que duró el debate previo, “borra los efectos horribles del viejo NAFTA [Tratado de Libre Comercio de América del Norte]” y contribuye a dar “certidumbre” a las inversiones que están realizando las empresas en la manufactura.
“Vi el impacto de NAFTA en mi comunidad”, añade Paul Mitchell, también de Michigan, “como destruyó miles de empleos”. Los acuerdos comerciales, justificó ante el plenario, “deben ser justos y equilibrados”. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, considera que el nuevo tratado representa una “mejora dramática” sobre el que está en vigor, protege a los trabajadores y servirá de “modelo” para futuros acuerdos comerciales.
El también demócrata John Lewis fue de los que se opuso hace 26 años a la adopción del TLC original. “Falló a nuestros trabajadores”, afirmó durante su intervención ante el plenario, “destrozó los sueños de una generación”. Lo que no pensó el congresista es que llegaría el día para reescribirlo. El TMEC, justificó al explicar su apoyo al texto legislativo, “sienta la fundación para un nuevo modelo de política comercial”.
El TLC original se adoptó en 1993 con 234 votos a favor y 200 contra. En este momento no hay fecha para la ratificación final del TMEC en el Senado, que debe producirse antes de mediados de febrero. La idea de Mitch McConnell, el líder de la mayoría republicana, es que se someta a votación tras el juicio político a Donald Trump en enero. Nancy Pelosi dice que el hecho que el presidente se apunte la adopción como una victoria es “un beneficio colateral”.
El acuerdo comercial que actualiza el viejo TLC incrementa el acceso de los productores lácteos estadounidenses al mercado canadiense, establece reglas de origen más estrictas para los componentes que integran los vehículos que se ensamblan en la región y se establece por primera vez un salario mínimo de referencia. Así mismo incorpora disposiciones sobre comercio digital, propiedad intelectual, medicamentos y medio ambiente.
Los demócratas y la Casa Blanca discutieron durante un año sobre como reforzar los mecanismos del TMEC para evitar que las compañías exportaran empleos hacia México para reducir costes. El tratado ya fue aprobado el martes en comité también con un sólido margen. Solo un demócrata se opuso. Bill Pascrell, de Nueva Jersey, reconoció que se introdujeron muchas mejoras, pero las considera insuficientes para impedir la exportación de mano de obra.
“Ningún acuerdo comercial es perfecto”, admitió Kevin Brady. El republicano de Texas, sin embargo, insiste en que el nuevo acuerdo comercial aportará más actividad económica, más empleo y permitirá a la región norteamericana competir a escala global con países como China. “No es una victoria republicano o demócrata sino para el pueblo gracias a que estrechan relaciones entre dos socios”. Nancy Pelosi reconoció en este sentido el esfuerzo de México y Canadá.
La aprobación del tratado en la Cámara baja representa un respiro para el Gobierno mexicano que en el último año se dedicó a demostrar a los legisladores demócratas que sus compromisos de homologar al sector laboral eran alcanzables. México reformó su Ley federal del trabajo para mejorar el sistema de justicia laboral y dar a los sindicatos mayor independencia. Además, el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió a elevar el salario mínimo un 2% por encima de la inflación en los próximos cuatro años. “Es benéfico este acuerdo para el pueblo de Canadá, Estados Unidos y nosotros los mexicanos. Estamos bien y de buenas”, dijo López Obrador en un vídeo en sus redes sociales en el que aparece viendo una transmisión en directo de la sesión en el Capitolio. “Con la aprobación del TMEC está por iniciar una nueva etapa de inversión y crecimiento para México”, ha publicado en su cuenta de Twitter el ministro de Exteriores, Marcelo Ebrard.
En Canadá, la Cámara de los Comunes comenzó el 12 de diciembre con el proceso de discusión de la ley para implementar el acuerdo comercial, después el debate se trasladará al Senado. Se estima que el Parlamento canadiense termine con la aprobación de TMEC en abril de 2020.