4 de agosto de 2021 – Washington – EFE.
La situación epidemiológica en Estados Unidos se ha vuelto ya en la pandemia de la variante delta del coronavirus SARS-CoV-2, que avanza sin freno y está detrás de casi todos los nuevos casos, por lo que el Gobierno no descarta administrar una tercera dosis de la vacuna.
Según los datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), la mutación delta y sus diferentes subvariantes estuvieron detrás del 93 % de los casos secuenciados en EEUU durante las dos últimas semanas de julio.
Incluso hay partes de EEUU con bajas tasas de vacunación, como el medio oeste, donde se ubican Kansas, Iowa y Misuri, entre otros, donde ese porcentaje es superior y alcanza el 98 %.
Hace dos semanas, la directora de los CDC, Rochelle Walensky, afirmó que la variante delta era culpable del 83 % de los casos secuenciados de covid-19 en el país.
DELTA SE DISPARA EN EEUU
A finales de mayo, esa mutación solo suponía el 3 % de los nuevos contagios de la enfermedad, mientras que la variante alfa era la dominante y causaba el 69 % de las nuevas infecciones.
Actualmente, según los CDC, alfa únicamente supone el 2,9 % de los nuevos casos.
Ante el progreso de la variante delta, una de las máximas autoridades sanitarias del país, el cirujano general Vivek Murthy, se reunió este miércoles con sus precedesores en el cargo para analizar la situación de la pandemia.
Murthy fue tajante a la hora de señalar a los culpables de la expansión de delta por EEUU: los no vacunados.
“Seamos 100 % claros, la vasta mayoría de la transmisión que está pasando en nuestro país ahora se está produciendo a través de los individuos no vacunados que están enfermando y luego transmiten la infección a otros”, indicó el cirujano general en declaraciones a la prensa tras el encuentro.
En ese sentido, remarcó que de ningún modo son las personas inmunizadas las responsables de la expansión del virus y de la variante delta, con lo que animó a los estadounidenses a vacunarse.
Esa mutación ha disparado el número de casos en EEUU en un solo mes, ya que se ha pasado de una media de menos de 15.000 contagios diarios a comienzos de julio a 80.000 nuevas infecciones al día en agosto.
UNA VACUNACIÓN QUE NO AVANZA
La variante ha triplicado las hospitalizaciones en este período de tiempo y ha hecho que se alcancen niveles en las primeras jornadas de agosto no vistos desde finales de febrero.
Y mientras, la campaña de vacunación se ha estancado: a fecha de hoy el 57,9 % de la población de EEUU ha recibido una dosis de la vacuna, frente al 49,7 % al que se le ha administrado la pauta completa, de acuerdo a los CDC.
Murthy destacó que las vacunas ofrecen un alto grado de protección frente al virus, lo que incluye su variante delta.
“Hemos visto que esa protección sigue siendo alta, increíblemente alta, frente a los fallecimientos y hospitalizaciones, incluso cuando miramos datos de otros lugares, como Escocia, Inglaterra, Canadá o Israel”, afirmó.
En ese sentido, no descartó la posibilidad de que las autoridades apoyen la administración de una tercera dosis de la vacuna para reforzar dicha protección, una opción que todavía se está estudiando.
“Creo que la gente debería asumir que existe la posibilidad, es una posibilidad realista de que necesitemos (una dosis de) refuerzo”, opinó Murthy, preguntado al respecto por la prensa.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, fue también preguntada sobre ese tema en su rueda de prensa diaria y dijo que el país tiene suministros suficientes para garantizar esa tercera toma si finalmente la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) de EEUU decide recomendarla.
EXCEPTICISMO ANTE LA PETICIÓN DE LA OMS
Psaki reaccionó también con escepticismo a la petición de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de una moratoria global a una tercera dosis de la vacuna, y se negó a elegir entre donar algunas de ellas y reservarse otras.
“Creemos que es una elección irrelevante y que podemos hacer ambas cosas”, señaló la portavoz.
Y de cara a futuras pandemias, el presidente, Joe Biden, se reunió este miércoles con uno de sus asesores, el médico Eric Lander, director de la Oficina de Política de Ciencia y Tecnología del Gobierno, para hablar de los planes para afrontar situaciones similares a la actual.
Psaki explicó que Biden cree que, pese a que todavía no se ha salido de la presente, es importante mirar al futuro para garantizar que existen los fondos necesarios ante posibles futuras pandemias y conversar con científicos como Lander.