Los objetos son muy similares al que llegó este miércoles a la sede neoyorquina de la cadena de televisión CNN
25 de octubre de 2018 – Nueva York – Agencias.
La policía de Nueva York ha retirado este jueves un paquete sospechoso en el edificio donde se encuentran el restaurante y las oficinas de la productora de cine de Robert de Niro. El local está ubicado en la calle Greenwich del barrio de Tribeca, al sur de la isla de Manhattan. Los artificieros del cuerpo de policía acordonaron la zona a primera hora de la mañana. El FBI confirmó después que se trataba de una carta de características similares a la que obligó a desalojar este miércoles la sede neoyorquina de la cadena de televisión CNN. Se están investigando una decena de envíos.
Las autoridades también han confirmado esta mañana que ya han localizado dos paquetes dirigidos a Joe Biden, vicepresidente con Barack Obama, en una oficina de correos de Delaware. Este miércoles, el sistema postal estadounidense detectó que había un sobre sospechoso enviado a una dirección del demócrata en este Estado, pero que fue devuelto. Las autoridades no han desvelado el contenido, pero las fotos hechas públicas del sobre muestran un formato idéntico.
Los nuevos anuncios tienen lugar después de que en los dos últimos días se hayan detectado otros paquetes enviados por correo postal a los expresidentes Bill Clinton y Barack Obama. El filántropo millonario George Soros también recibió este lunes una bomba casera de las mismas características.
El paquete sospechoso fue descubierto por un empleado de la productora de cine de De Niro, que avisó a la policía a las 4 de la madrugada, hora local. La carta tenía el mismo remitente: Debbie Wasserman Schultz, antigua presidenta del Comité Nacional Demócrata.
Robert de Niro, de 75 años, está en la lista negra de los ultraconservadores por haber manifestado su rechazo a las políticas de Donald Trump. En su intervención durante la pasada ceremonia de los Tony Awards, el actor criticó al presidente, llegando a decir: “Que le jodan a Trump”. “Ya no es abajo con Trump”, aclaró en el Radio City Music Hall. El presidente no tardó en devolverle el golpe. El también galardonado con el Oscar le calificó durante la campaña de “loco”, “idiota” y “estúpido”.
La policía de Nueva York y la oficina federal de investigación ya advirtieron de que podría haber más paquetes sospechosos circulando por el sistema de correo postal, con dispositivos construidos como si fueran bombas. Ninguna de las nueve cartas interceptadas hasta ahora ha detonado ni han llegado a las manos de los destinatarios. El FBI debe determinar aún el origen y el responsable de estos envíos.
Bombas caseras
El hecho de que los artefactos fueran interceptados antes de detonar, facilita el trabajo de los expertos a la hora de examinar los componentes e identificar su origen. Las bombas caseras están compuestas de un pequeño tubo taponado por los extremos y relleno con un polvo blanquecino. Las instrucciones para ensamblarlos están disponibles en Internet. Es su simplicidad lo que hace difícil detectarlas.
El departamento de policía de Nueva York se ha limitado a comunicar que ha retirado el paquete, pero evitó dar más detalles sobre el contenido. La investigación está en curso para recopilar evidencias y están tratando de determinar el trazo de estos paquetes por el sistema del servicio postal, que procesa más de 170.000 millones de envíos al año.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ordenó este jueves reforzar la presencia de efectivos de seguridad por la ciudad. “No sabemos aún con lo que estamos lidiando”, afirmaba esta mañana tras reportarse el nuevo paquete sospechoso, “pero queremos que los neoyorquinos sepan que estamos adoptando todas las medidas de precaución necesarias”. “Alguien trata de aterrorizarnos”, comentó por su parte el alcalde neoyorquino, Bill de Blasio.
Trump culpa a la prensa
Mientras las fuerzas de seguridad lidiaban con la situación en Nueva York y Delaware, el presidente Trump acudía a las redes sociales para volver a cargar contra la prensa. “Gran parte de la rabia que vemos hoy en nuestra sociedad”, asegura el republicano en un tuit, “es causada por las informaciones deliberadamente falsas e inexactas”. Se trata, dice, de “algo tan malo y odioso que excede cualquier descripción”. Y remacha: “¡Deben cambiar su comportamiento, rápido!”.