Por otro lado, Abás renunció a los Acuerdos de Oslo y a cualquier otro firmado desde entonces como consecuencia de la decisión de EEUU de reconocer Jerusalén como capital de Israel
13 de diciembre de 2017 – EFE.
Los países de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) han acordado hoy reconocer Jerusalén Este como la capital del Estado palestino y han invitado al resto de naciones a hacer lo propio, en respuesta a la decisión de EEUU de declarar la ciudad como capital de Israel.
“Declaramos Jerusalén Este como la capital del Estado de Palestina e invitamos a todos los países a reconocer al Estado de Palestina con Jerusalén Este como su capital ocupada”, se indica en el borrador de la declaración preparada hoy en Estambul por esta organización, formada por 57 países de mayoría musulmana.
La OCI, formada por 57 países de mayoría musulmana, incluye desde su fundación en 1969 a Palestina como miembro pleno, con su capital en Jerusalén.
El documento, presentado por “los reyes, jefes de Estado y de Gobierno de los Estados miembros de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI)”, presenta en 23 puntos la postura del mundo musulmán ante la decisión de EEUU.
En ese texto, la OCI “rechaza y condena en los más fuertes términos” lo que llama una “decisión unilateral” de reconocer Jerusalén como capital de Israel, al que se refiere como “fuerza de ocupación”.
Los países musulmanes califican el anuncio de Washington de nulo y carente de legalidad y lo considera un ataque a los derechos del pueblo palestino y un “deliberado deterioro de todos los esfuerzos de paz”.
Además, el texto alerta de que dará ímpetu a los movimientos extremistas y supone una amenaza a la paz y la seguridad internacional.
Según un comunicado hecho público por la OCI, la declaración final pedirá también a los miembros del organismo que impongan “restricciones políticas y económicas a los Estados, altos cargos, Parlamentos, empresas e individuos que reconozcan la anexión israelí de Jerusalén o colaboren con las medidas que intentan perpetuar la colonización israelí de los territorios palestinos ocupados”.
El comunicado también considera al Gobierno estadounidense “plenamente responsable de cualquier repercusión” de la “decisión ilegal” de reconocer Jerusalén como capital de Israel”, que considera “una clara deserción del Gobierno estadounidense de su rol como mediador de paz”.
Además, el borrador de la declaración pide a todos los miembros de la OCI incrementar su apoyo diplomático y sobre todo económico a Palestina y sus habitantes.
Abás renuncia a los Acuerdos de Oslo
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, ha renunciado este miércoles a los Acuerdos de Oslo y a cualquier otro firmado desde entonces, como consecuencia de la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer Jerusalén como capital de Israel.
“La decisión sobre Jerusalén nos libera de todo acuerdo que hayamos firmado. Por ejemplo los Acuerdos de Oslo. Los firmamos, pero ahora ya no son vinculantes para nosotros“, ha declarado Abás durante la cumbre extraordinaria de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) en Estambul.
Los Acuerdos de Oslo, firmados en septiembre de 1993, pretendían establecer la ruta del proceso de paz entre israelíes y palestinos y han marcado los siguientes pactos firmados entre ambas partes. Entre otras cosas, establecieron el reconocimiento internacional de la Autoridad Palestina como cuerpo administrativo en Cisjordania y Gaza, y pusieron la base para la colaboración administrativa entre el Gobierno israelí y organismos palestinos en los territorios ocupados. El apretón de manos de entonces entre Yaser Arafat y Yizhak Rabin despertó muchas ilusiones, desvanecidas hoy debido a la pasividad de Estados Unidos y la comunidad occidental.
Abás ha insinuado que podría abandonar asuntos administrativos civiles, como los servicios de salud, y devolver toda la responsabilidad a Israel. “Nosotros no tenemos autoridad. ¿Por qué deberíamos responsabilizarnos? Ustedes son el Estado ocupante”, ha dicho. “Ya no estamos comprometidos con ningún acuerdo, desde el de Oslo hasta hoy”, ha insistido el mandatario palestino en un discurso en la cumbre en el que anunció el fin del papel de EEUU como mediador en el conflicto por su inclinación a favor de Israel.
“Jerusalén es y siempre será la capital de Palestina”, ha incido Abás, que también ha indicado que la decisión de Trump viola el derecho internacional y “cruza todas las líneas rojas” justo en un momento “en el que pensamos que podríamos trabajar juntos para una paz amplia”. “Trump ha hecho lo contrario. Ha provocado a todo el mundo”, ha lamentado.
El presidente palestino ha adelantado además que tratará de que el Consejo de Seguridad de la ONU apruebe una resolución que anule el anuncio del presidente estadounidense. También ha pedido que se impongan sanciones o presiones económicas contra Estados Unidos. “La decisión de Trump ofrece Jerusalén a Israel como regalo, algo unilateral, como si les regalara una ciudad estadounidense”, ha agregado. “La decisión reforzará a grupos extremistas para transformar un conflicto político en uno religioso. Que así sea. El mundo sufrirá las consecuencias y debe asumir la responsabilidad”, ha advertido Abás.