24 de agosto de 2023 – EE.UU. – EFE.
El sospechoso de asesinar a una niña inmigrante de 11 años de Guatemala, cuando se encontraba sola en su vivienda mientras su padre estaba en el trabajo, compareció este jueves por primera vez en una corte de Texas, donde le negaron el derecho a fianza.
Juan Carlos García-Rodríguez , de 18 años, tuvo hoy su primera audiencia en una corte del condado de Harris (Texas) para responder por la violación y el asesinato de la niña María González el pasado 12 de agosto, en la ciudad de Pasadena.
El sospechoso fue detenido por la Policía de Shreveport, en Luisiana, una semana después del crimen y fue extraditado el miércoles por la tarde para responder por los cargos de asesinato capital, una clasificación que permite a los fiscales en Texas buscar la pena de muerte.
García-Rodríguez, un inmigrante guatemalteco, entró al tribunal vestido con un mono amarillo y esposado, según imágenes compartidas por la televisora ABC13.
En el momento de su arresto las autoridades dijeron que García-Rodríguez hizo una confesión completa, pero en la audiencia de hoy afirmó que dos hombres lo obligaron a punta de pistola a cometer la agresión sexual y matar a la niña.
A García-Rodríguez se le negó el derecho a fianza, mientras el proceso judicial sigue.
El cuerpo de la niña fue enviado este jueves a Guatemala, donde vive su madre, después que este miércoles la comunidad de Pasadena, una ciudad de mayoría hispana de la zona metropolitana de Houston, le diera el último adiós.
La menor fue abusada sexualmente y asesinada en un complejo de apartamentos de Pasadena en el que vivía con su padre, Carmelo González, desde hacía tres meses.
Según documentos judiciales, la mañana del crimen el padre de la menor salió a trabajar y 15 minutos después recibió en su teléfono un mensaje de su hija en el que ella le decía que alguien estaba llamando a la puerta.
Después de un breve intercambio de mensajes, el inmigrante guatemalteco no volvió a saber de su hija. Unos familiares fueron al apartamento pero la pequeña no contestó, lo que motivó al padre a salir del trabajo y acudir al apartamento.
González encontró el cuerpo de su hija envuelto en plástico y metido en una bolsa para la ropa, que estaba escondida debajo de la cama en su dormitorio.
Una llave encontrada en el apartamento donde ocurrió el asesinato y que no abría ninguna de las puertas de la vivienda apuntó la investigación hacia García Rodríguez, que residía en un apartamento cercano pero se marchó dos días después del asesinato.
El sospechoso ingresó a Estados Unidos en enero pasado cuando se entregó a agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) en El Paso (Texas) siendo un menor de edad y después fue entregado a patrocinadores en Luisiana, según información obtenida por ABC13.
Lisa Calligan, de la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Harris calificó hoy el caso como “muy grave” y aplaudió el hecho de que no se le otorgara una fianza al acusado porque creen que existe riesgo de fuga.
Por su parte el abogado defensor Mario Madrid dijo que el acusado tiene derecho a un juicio y “en este momento, es inocente hasta que el estado lo demuestre culpable”.
García-Rodríguez deberá regresar a la corte el 30 de octubre.