Ocho atracadores vestidos de policía y armados con fusiles de asalto han sustraído 750 kilos de oro valorados en 30 millones de dólares
26 de julio de 2019 – Agencias.
Un robo que parece sacado de la serie «La casa de papel». Hombres armados robaron el jueves 720 kilos de oro (más de 30 millones de dólares) y otros metales preciosos desde una terminal de carga en el aeropuerto de Sao Paulo, el más transitado del país y principal puerta de entrada a Brasil, en una operación en la que tomaron dos rehenes.
Sin pegar un solo tiro. Ni heridos. Un robo de guante blanco, algo poco habitual el Brasil donde los atracos acaban en masacre.
«Ocho hombres armados con fusiles, a bordo de dos vehículos que simulaban ser de la Policía Federal, entraron al galpón [de Exportación], abordando a los agentes del Terminal de Cargas y se llevaron 750 kg de metales preciosos, incluyendo oro, que iban en dirección a Zurich y Nueva York», informó la empresa GRU Airport, que administra el aeropuerto de Guarulhos, el principal de Brasil.
De acuerdo con los vídeos de las cámaras de seguridad publicados por la TV Globo, los asaltantes colocaron adhesivos dorados en camionetas negras para imitar los carros de la Policía Federal (PF) de Brasil y vestían trajes negros e insignias similares a los de la PF. La acción, capturada en vídeo, duró solamente dos minutos y medio.
Tras ingresar el almacén de exportación de la terminal de carga, ordenan a los empleados colocar la carga en la caja de la camioneta con una máquina elevadora y otros paquetes de menor porte en la cabina del vehículo. Para saber dónde se encontraba la carga, el grupo habría tomado como rehén la noche anterior a un supervisor de logística y a su familia.
Según fuentes policiales citadas por el diario «Folha de São Paulo», cuatro adultos y cuatro niños estuvieron en poder de los criminales por aproximadamente 20 horas. Posteriormente, abandonaron los dos vehículos, que también estaban con distintivos de la Policía Federal, en otro punto de la región, a unos doce kilómetros de distancia del aeropuerto de Guarulhos, donde también soltaron a los rehenes, los cuales se encuentran en buen estado.
Aún se desconoce a quién pertenecían los 720 kilos de oro. Los sospechosos abandonaron después los dos vehículos con los que realizaron el robo y se montaron, con la carga de oro, en una camioneta Chevrolet S10 blanca y una ambulancia. La Policía cree que los atracadores consiguieron información privilegiada, mientras mantenían como rehenes a la familia del supervisor.
La corporación ha desplegado un operativo en la región para recuperar el oro y detener a los infractores, de los que, hasta el momento, se desconoce su identidad, mientras avanzan los interrogatorios a los familiares y a otros trabajadores del aeropuerto. La vigilancia policial fue reforzada en la región mientras agentes de las policías Militar, Civil y Federal intentan localizar a los involucrados. Éste fue el tercer ataque a terminales de carga en los últimos cuatro años en São Paulo.