2 de agosto de 2017 – EFE.
El presidente de EEUU, Donald Trump, firmó hoy la ley aprobada por el Congreso que endurece las sanciones contra Rusia, informó a Efe un funcionario de la Casa Blanca.
La ley, adoptada la semana pasada por el Senado, fortalece las sanciones contra Rusia debido a su supuesta interferencia en las elecciones de 2016 en EEUU, sus acciones en Ucrania y en Siria, y sus violaciones de derechos humanos, y limita la capacidad de Trump de levantarlas sin el visto bueno del Congreso.
El presidente promulgó la ley después de la orden decretada la semana pasada por Moscú para que Washington recorte su personal diplomático en Rusia en respuesta a esas últimas sanciones aprobadas por el Congreso norteamericano.
El Ministerio de Exteriores ruso ordenó el 28 de julio al Gobierno estadounidense que, a partir del 1 de septiembre, reduzca el número de diplomáticos y colaboradores que trabajan en su embajada en Moscú y en los consulados de San Petersburgo y otras ciudades, hasta el mismo número del personal diplomático ruso en EEUU.
Esa medida implica recortar la plantilla diplomática, técnica y de apoyo de las misiones de Estados Unidos en Rusia hasta dejarla en 455 personas, según informó el Ejecutivo ruso.
El pasado 27 de julio, el Senado de EEUU, con apoyo de republicanos y demócratas, aprobó por 98 votos a favor y sólo 2 en contra la legislación, que también incluye sanciones contra Corea del Norte e Irán por sus programas armamentísticos.
Anteriormente, la Cámara Baja estadounidense ya había aprobado el proyecto de ley por 419 votos a favor y únicamente 3 en contra.
El presidente ruso, Vladímir Putin, achacó la semana pasada las sanciones a una “histeria antirrusa” en EEUU, y su Ministerio de Asuntos Exteriores indicó que representan “un paso muy serio hacia la Äestrucción de las posibilidades de normalizar la relaciones”.
Pese a las sanciones, Trump ha intentado mejorar las relaciones con Rusia desde su llegada al poder en enero pasado, aunque ese intento se ha visto eclipsado por la investigación sobre los posibles lazos entre su campaña y Moscú en los comicios de 2016.