10 de diciembre de 2024 – Los Ángeles (EE.UU.) – EFE.
Un incendio descontrolado ha forzado la evacuación de alrededor de 6.000 personas en la ciudad de Malibú, California, debido al rápido avance de las llamas. Las autoridades también han cerrado varias carreteras y escuelas por el riesgo de propagación del fuego. El incendio, llamado Franklin, ha quemado más de 2.200 acres en menos de 24 horas, afectando especialmente la zona costera del Pacífico.
El fuego obligó al cierre de todas las escuelas en el centro y este de Malibú, áreas que albergan a más de 10.000 personas. Los bomberos de California, conocidos como FireCal, informaron sobre los esfuerzos para contener las llamas, que se originaron cerca de Malibu Canyon y el parque estatal Malibu Creek.
Las autoridades locales también tuvieron que ordenar la evacuación de la Universidad de Pepperdine, que se encuentra cerca del incendio. En la noche, la universidad emitió un aviso para que todo su personal se retirara de la zona. Los miembros de la comunidad universitaria fueron instados a refugiarse en el Centro del Campus Tyler o en la Biblioteca Payson.
La carretera costera, que conecta varias áreas clave, fue cerrada entre Carbon Canyon y Corral Canyon, lo que buscaba facilitar las evacuaciones y el trabajo de los equipos de emergencia. Esta medida también forma parte del esfuerzo por asegurar que el tránsito no interfiera con las labores de los bomberos.
El Servicio Nacional de Meteorología ha emitido un aviso de alerta roja hasta el miércoles, debido a fuertes vientos que podrían alcanzar hasta los 120 km/h. Estos vientos representan un riesgo significativo para la propagación del fuego, lo que ha aumentado la preocupación de las autoridades locales.
Los vientos intensos también podrían afectar otras áreas cercanas como el condado de Ventura, lo que ha generado mayor incertidumbre sobre el comportamiento del incendio. La situación sigue siendo volátil y los equipos de emergencia trabajan sin descanso para controlar las llamas.
Hasta el momento, se desconocen detalles sobre los posibles daños materiales o víctimas que haya causado el incendio. Las autoridades continúan investigando el origen del fuego y las circunstancias que llevaron a su rápida expansión.
El incendio sigue siendo un desafío para los equipos de bomberos, que se enfrentan a condiciones extremadamente adversas. Las evacuaciones y las alertas continúan en vigor, mientras se monitorea de cerca la evolución del fuego.
