La prefectura ha asegurado que la nube de humo no es tóxica
26 de septiembre de 2019 – EFE.
Una planta química situada en las afueras de la ciudad francesa de Ruán (noroeste) sufrió un espectacular incendio sin víctimas en la noche del miércoles al jueves que llevó a las autoridades a decretar el cierre de todos los centros escolares y a pedir a la población que permanezca en sus casas.
La Prefectura (delegación del Gobierno) recomendó en un mensaje colgado en su página web a los habitantes que se encuentran en un radio de 500 metros en torno a la factoría Lubrizol, que fabrica aditivos para lubrificantes, que no salgan de sus casas “por medida de prudencia”.
También decidió que permanezcan cerrados durante todo el día las escuelas, colegios y liceos de Ruán y de otros once municipios de su entorno.
El prefecto, Pierre-André Durand, puntualizó que, de acuerdo con los primeros análisis, la espesa columna de humo que seguía siendo visible a kilómetros a la redonda a las 8.30 locales (6.30 GMT), seis horas después del inicio del incendio, no presenta una “toxicidad aguda”.
El alcalde de Ruán, Yvon Robert, señaló, en declaraciones a la emisora “France Info”, que a primera hora de la mañana había entre 150 y 200 bomberos que trabajaban para extinguir el fuego, a los que se debían sumar refuerzos, llegados en particular de la región de París.
Durante la madrugada, los vecinos pudieron escuchar diversas explosiones, que se debieron a la deflagración de depósitos de hidrocarburos.
Como medida de precaución, se cortó el tráfico en los dos sentidos en la autopista A150, que comunica Ruán e Yvetot, a la altura de Canteleu.