31 de julio de 2017 – EFE.
Un paquete de iridio que sobrepasaba los límites de radiación permitidos viajó por vía aérea desde El Cairo hasta Zúrich y luego a Bruselas en dos vuelos regulares y permaneció 12 días en el aeropuerto de esta ciudad sin ser detectado, confirmó hoy a Efe la Agencia Federal de Control Nuclear (AFCN) belga.
Aunque las personas que viajaban en dichos vuelos pudieron estar expuestas en diferente grado a la radiación no existe riesgo de que hayan resultado contaminadas y en principio no deben tomar ninguna medida, aunque la Agencia aún debe concluir el análisis del material, explicó Silvayn Jonckhere, portavoz de la AFCN.
El paquete contenía iridio 192 “usado”, un elemento emisor de rayos gamma que se utiliza habitualmente en radiología industrial, para detectar defectos en componentes metálicos como tuberías, y también en radioterapia. Sin embargo, se desconoce para qué se había usado la cantidad que se encontró.
El paquete viajó de El Cairo a Zurich y de ahí a Bruselas el 13 de julio, en la bodega de dos aviones comerciales, y una vez en el aeropuerto belga fue almacenado durante doce días, hasta que el 25 de julio lo recogió la empresa destinataria.
Fue la compañía, especializada en la producción de fuentes radiactivas utilizadas para la industria, la que dio la voz de alarma al detectar que el nivel de radiación en el exterior del paquete era superior al máximo permitido de 2 milisiever (unidad utilizada para medir los efectos de la radiación).
Los inspectores de la AFCN, advertidos por la empresa, comprobaron que el remitente no había puesto el material en un primer contenedor para evitar la radiación y lo habían enviado sin verificar el nivel.
“Constatamos que el nivel de radiación era más elevado que el notificado, que no había sido etiquetado de forma correcta y que estaba mal sellado”, dijo Jonckhere.
El paquete pudo haber estado aislado en el almacén, pero no durante el vuelo, por lo que los pasajeros podrían haber tenido una exposición de entre 3,1 y 6,6 milisiever, mientras que la exposición media al año en Bélgica es de 2,8 milisiever.
Sin embargo, la AFCN afirma que “una exposición única como la sufrida en este incidente no representa un aumento significativo del riesgo para la salud” y señala a modo de ejemplo que en un escáner de abdomen la exposición sería de 8 milisiever.
Las fiscalías y ministerios de Asuntos Exteriores de Bélgica y Suiza se en cargarán de investigar el incidente, clasificado como de nivel 2 sobre un máximo de 7 en la escala de accidentes nucleares, para esclarecer lo ocurrido y avisar a los pasajeros que puedan haber estado expuestos.
Asimismo han advertido a la Seguridad de Estado egipcia para que tome las medidas o sanciones oportunas contra el remitente del paquete.