El hombre afroamericano grabó la escena en vídeo, lo que ha hecho que la despidan por su comportamiento racista
18 de octubre de 2018 – Agencias.
No es la primera ni, probablemente, la última vez que un estadounidense blanco llama a la policía para denunciar que un afroamericano está haciendo una actividad común como cuidar de unos niños, almorzar o ir a la piscina. La última vez fue el pasado viernes en San Louis, en EE UU, cuando un hombre negro llamado D’Arreion Toles intentaba acceder a su vivienda. Para su sorpresa, Hilary Brooke Mueller, una vecina blanca, decidió bloquearle el paso y exigirle que le enseñara las llaves de su apartamento para dejarlo entrar al edificio. Él no accedió a responderle a sus preguntas y entró en el edificio. La mujer lo persiguió hasta el ascensor y subió con él hasta la puerta de su piso para comprobar que Toles era efectivamente un vecino del edificio. El hombre grabó la escena al completo con el móvil y la publicó en la red social Facebook. La publicación alcanzó siete millones de reproducciones y todos los medios nacionales se hicieron eco del vídeo. La repercusión fue tal que la empresa inmobiliaria Tribeca-STL, donde Mueller trabajaba, decidió despedirla. “Estamos orgullosos de tener empleados y residentes de muchos orígenes raciales y no aceptaremos el racismo en nuestra empresa”, afirmaba la compañía en un comunicado en su web.