24 de abril de 2025 – CONDADO DE TUSCALOOSA, Alabama – Agencias.
Una mujer de Demopolis fue condenada a cadena perpetua en el Departamento Correccional de Alabama, por el asesinato en 2022 de su novio y padre de sus tres hijos.
Angélica Quintana fue arrestada y acusada del asesinato de Dennis Melton después que, según las autoridades, atropellara a su novio con un auto en la Interestatal 59/20 en febrero de 2022.
El 14 de febrero de 2025, un jurado emitió un veredicto de culpabilidad por asesinato, tras un juicio de casi una semana. Durante el juicio, los testigos declararon que conducían por la I-20/59 en Tuscaloosa, cerca del kilómetro 76, cuando vieron el auto de Quintana estacionado en el carril de emergencia a la izquierda. Los testigos afirman que entonces observaron a Quintana girar su auto en dirección a Melton, quien caminaba al otro lado de la carretera.
Testigos describen que Quintana condujo su auto por tres carriles y atropelló deliberadamente a Melton por el lado derecho de la carretera. Según dos camioneros, Quintana golpeó a Melton por detrás, lo que provocó que se estrellara contra el capó del vehículo de Quintana y cayera de bruces sobre el pavimento. Quintana, según los testigos, atropelló a Melton, arrastrándolo por el pavimento. Melton llevaba un chaleco de seguridad naranja brillante que dejó una marca naranja en el pavimento, mostrando la distancia que fue arrastrado.
Durante el juicio, aproximadamente 10 testigos, incluyendo la hermana de la víctima, afirman haber escuchado a Quintana decirle a Melton: “Si sales del auto, te veré morir”. Durante el juicio, se mostró un video grabado por un testigo presencial, que mostraba a Melton atrapado debajo del vehículo de Quintana dando su último aliento.
En la sentencia, presidida por el juez Pruet, la familia de Melton estuvo presente y su hermana se dirigió a la sala. Solicitó justicia al tribunal e informó que le había puesto a su futuro hijo, Dennis, el mismo nombre que su hermano.
La solicitud de sentencia del estado fue de 25 años y los abogados defensores solicitaron al tribunal que se mostrara indulgente con Quintana y que se considerara a sus hijos pequeños. El juez Pruet afirmó haber revisado exhaustivamente las pruebas antes de dictar sentencia y haber observado el comportamiento de Quintana durante el juicio, el cual no mostró emoción ni remordimiento. El hecho de que Quintana, según el juez, nunca llamara al 911 ni solicitara asistencia de emergencia, se tuvo en cuenta para la sentencia final.
Quintana fue condenada a cadena perpetua en el Departamento Correccional de Alabama.
