30 de junio de 2025 – Nueva York – EFE.
Un grupo compuesto por exmilitares y activistas realizó una protesta frente a la misión de Estados Unidos ante la ONU en Nueva York para manifestarse contra la guerra en Gaza. Varios de ellos participan en una huelga de hambre que ya cumple 40 días, con el fin de reflejar las condiciones extremas que viven los habitantes de Gaza.
Los manifestantes, integrantes de una campaña llamada ‘Veteranos y aliados en huelga de hambre por Gaza’, eran en su mayoría personas mayores y excombatientes. Portaban carteles y gritaron consignas rodeados por una fuerte presencia policial, más numerosa que los propios participantes.
Kathy Breen, una de las huelguistas, afirmó que su protesta es producto de la desesperación ante la ineficacia del Consejo de Seguridad de la ONU y la parálisis del Congreso estadounidense. Breen lleva más de veinte días en huelga y denuncia la falta de acción ante la crisis humanitaria en Gaza.
El grupo forma parte de la organización ‘Veteranos por la paz’ y exige dos cosas: que se permita la entrada de ayuda humanitaria bajo control de la ONU y que se detenga la venta de armas de Estados Unidos a Israel. Hasta el 28 de junio, cerca de 800 personas en todo el país se habían sumado a la huelga, restringiendo su ingesta diaria a 250 calorías, similar al consumo calórico promedio en Gaza bajo el bloqueo.
Los manifestantes compartieron testimonios personales para explicar su compromiso. Breen, por ejemplo, contó que su experiencia en Irak en 2003 la marcó profundamente, al presenciar directamente los estragos causados por bombas estadounidenses. Llevaba una bandera con una cita crítica del historiador Howard Zinn sobre la complicidad con la violencia.
Otro exmilitar, Jim Pandaru, expresó su repudio al apoyo estadounidense a Israel y sostuvo que muchas conmemoraciones patrióticas ignoran las consecuencias reales de la guerra. Ambos activistas coincidieron en que tanto EE.UU. como Israel son responsables de la situación y llamaron a intensificar la desobediencia civil para presionar por un cambio. Al finalizar la protesta, los manifestantes se retiraron pacíficamente, dejando momentáneamente vacía la zona diplomática frente a la ONU.
