21 de julio de 2025 – Los Ángeles (EE.UU.) – EFE.
El Gobierno de Estados Unidos decidió retirar a los 700 marines que habían sido enviados a Los Ángeles por orden del presidente Donald Trump. Estos militares fueron desplegados para controlar las protestas que surgieron en la ciudad tras las redadas migratorias realizadas en junio pasado. La información fue confirmada este lunes por el Pentágono.
El portavoz del Pentágono, Sean Parnell, explicó que la orden de retirada se da porque la situación en Los Ángeles ha vuelto a la estabilidad. La presencia de los marines buscaba enviar un mensaje claro de que no se permitiría el desorden ni la violencia en la ciudad durante las protestas.
Esta decisión de repliegue se suma a la retirada previa de 2.000 efectivos de la Guardia Nacional, que había sido anunciada la semana pasada. En junio, Trump envió más de 4.000 miembros de la Guardia Nacional junto con los 700 infantes de marina para contener las manifestaciones.
Las protestas, aunque mayoritariamente pacíficas, en ocasiones se tornaron violentas y hubo enfrentamientos entre manifestantes y policías. La principal tarea de estas fuerzas era proteger edificios federales y apoyar a las autoridades locales durante las masivas protestas contra las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
El despliegue de los militares se realizó sin la aprobación del gobernador de California, Gavin Newsom, lo que generó tensiones entre su administración y la Casa Blanca. Sin embargo, un tribunal federal de apelaciones en California dictaminó que el presidente Trump tenía la autoridad para mantener el control sobre las tropas enviadas.
Este conflicto entre el gobierno federal y el estado sobre el uso de fuerzas militares durante las protestas reflejó la fuerte división política en torno a las políticas migratorias y el manejo de las manifestaciones. Con el repliegue de las tropas, la situación parece haberse calmado temporalmente en la ciudad.