2 de junio de 2025 – Ciudad de Panamá – EFE.
La empresa Chiquita Panamá, subsidiaria de la multinacional estadounidense Chiquita Brands, informó al Gobierno de Panamá que esta semana procederá con el despido de más de mil trabajadores, como consecuencia de la huelga prolongada que mantienen sus empleados. La noticia fue confirmada por el Ministerio de Trabajo, que indicó que ya se ha iniciado el proceso con la destitución de los 60 trabajadores administrativos de la compañía, lo que significa que la empresa ha quedado sin personal en esa área.
La ministra de Trabajo, Jackeline Muñoz, quien forma parte de una Comisión de Alto Nivel nombrada por el presidente José Raúl Mulino para atender la crisis en la provincia de Bocas del Toro, indicó que en los próximos días se formalizarán 1.600 despidos adicionales. Esta medida supondría la eliminación total de la plantilla de Chiquita Panamá en la zona, lo cual representa un golpe significativo para el empleo y las iniciativas de reactivación económica en la provincia.
Muñoz criticó que esta situación haya sido provocada, según ella, por un sector que solo ha contribuido al aumento del desempleo y que ha afectado a ciudadanos ajenos al conflicto. Recalcó que muchas personas simplemente quieren que se restablezca la actividad económica en la región. Como parte de los esfuerzos del gobierno, se solicitó al sindicato que desbloquee las vías cerradas, ya que esos bloqueos constituyen un delito.
La respuesta del sindicato, según Muñoz, fue que seguirán en las calles hasta que se apruebe una reforma a una ley especial que regula el sector bananero. Esto ha complicado aún más las negociaciones. Por su parte, el ministro de Comercio, Julio Moltó, expresó su desconcierto, argumentando que ya se trabajó en un nuevo proyecto legal que incluye beneficios adicionales, especialmente para las mujeres trabajadoras del sector, y cuestionó qué más se está exigiendo.
Moltó pidió nuevamente que se abran las carreteras, señalando que las acciones del sindicato están perjudicando a terceros y que no tienen justificación. Mientras tanto, la empresa anunció previamente el despido de cerca de 5.000 trabajadores en Bocas del Toro, tras el fracaso de las negociaciones con el sindicato y debido a lo que calificaron como “daños irreversibles” en la producción, causados por el abandono de las fincas.
El impacto económico es considerable, ya que Chiquita controla el 90 % de la producción bananera en Panamá, y este producto representa el 17,5 % de las exportaciones del país. La situación se agrava con los bloqueos en Bocas del Toro, provincia que depende fuertemente del turismo y la industria bananera. Ante esta crisis, el Gobierno decretó el estado de emergencia el 27 de mayo, estableciendo una comisión especial para implementar medidas urgentes y facilitar contrataciones mediante procesos excepcionales que impulsen la recuperación económica en la región.
