5 de agosto de 2025 – Tapachula (México) – EFE.
En una operación llevada a cabo por la Fiscalía General de la República (FGR) en México, Luis Rey Villagrán, un activista y coordinador del Centro de Dignificación Humana (CDH), fue detenido este martes. Se le considera el principal organizador de una caravana de migrantes que estaba programada para iniciar su recorrido desde Tapachula, en el sur de México, a la mañana siguiente.
La detención de Villagrán se produjo después de que se reuniera con un grupo de migrantes en el parque Bicentenario. Durante el encuentro, el activista estaba ultimando los preparativos de la caravana y había anunciado el respaldo que recibirían de diversas organizaciones eclesiásticas a lo largo de su travesía. Este arresto ha generado una gran incertidumbre entre los participantes de la movilización.
De acuerdo con la información proporcionada por sus familiares, a Villagrán se le acusa del delito de delincuencia organizada. Tras ser detenido, fue llevado a la subdelegación de Procedimientos Penales B de la FGR en el estado, donde rápidamente se congregaron familiares, amigos y su equipo de defensa legal para brindarle apoyo y asistencia.
El activista mexicano es conocido por su postura crítica hacia instituciones como el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) en la frontera sur. Ha sido una figura clave acompañando a numerosas caravanas de migrantes en su intento por llegar a otras partes de México y a la frontera norte, buscando mejores condiciones de vida.
La detención ocurre en un momento de gran tensión y espera para un grupo de migrantes que lleva meses varado en Tapachula. Estos individuos se organizaron en el parque Bicentenario con la intención de unirse a la caravana, pero ahora se encuentran en la incertidumbre sobre si la movilización prevista para el miércoles continuará o si será pospuesta indefinidamente debido al arresto de su líder.
Este suceso en México se enmarca en un contexto migratorio más amplio y complejo, influenciado por cambios políticos en Estados Unidos. La administración de Donald Trump ha desmantelado programas y beneficios migratorios establecidos por su predecesor, como el parole humanitario y la aplicación CBP One. Estas medidas han dejado a más de medio millón de personas en un estado de limbo legal o en situación irregular, lo que ha impulsado a muchos a buscar alternativas como las caravanas, mientras Trump busca acelerar las deportaciones para cumplir sus promesas de campaña.