12 de marzo de 2025 – Nueva York – EFE.
La Administración del presidente Donald Trump decidió retirar una demanda civil contra Southwest Key Programs, una de las principales empresas encargadas de alojar a niños migrantes no acompañados. La acusación contra la empresa era por abuso y acoso sexual hacia los menores en sus instalaciones. En lugar de continuar con el litigio, el Gobierno también optó por dejar de utilizar los servicios de esta compañía.
La decisión de retirar la demanda y cesar el uso de los servicios de Southwest Key se basó en que todos los menores habían sido trasladados a otros albergues y centros que no pertenecían a esta organización. Southwest Key había sido uno de los principales proveedores de alojamiento para menores migrantes, con contratos que sumaban 3.000 millones de dólares provenientes del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS).
La empresa había sido acusada de abuso y acoso sexual entre 2015 y 2023 en albergues ubicados en California, Texas y Arizona. En respuesta a estas denuncias, HHS suspendió los contratos con Southwest Key y comenzó a reubicar a los menores en otros centros, lo que llevó al Departamento de Justicia a desestimar la demanda contra la organización.
En los días previos a la retirada de la demanda, se informó que aproximadamente cinco mil empleados de Southwest Key en sus albergues para menores migrantes no acompañados en tres estados fueron suspendidos temporalmente. Esta suspensión fue el resultado de la congelación de fondos federales, una medida tomada por la administración Trump.
La portavoz de Southwest Key, Anais Biera Miracle, explicó que debido a la congelación de los fondos y a la orden de suspensión emitida por la Oficina de Reubicación de Refugiados (ORR), la organización se vio obligada a suspender a unos 5.000 empleados. La situación fue comunicada públicamente a través de declaraciones enviadas a los medios.
Southwest Key, una organización sin fines de lucro fundada en 1996, había sido el principal proveedor de albergue y transporte para menores migrantes sin compañía de adultos. Durante más de dos décadas, la empresa gestionó estos servicios esenciales para los niños que cruzaban la frontera estadounidense sin la presencia de sus padres o tutores legales.
Como parte de los recortes, los albergues de Southwest Key también cancelaron sus programas educativos de escuela en el hogar y los servicios de reunificación familiar en los estados de Arizona, California y Texas. La suspensión de estos programas afectó directamente a los menores bajo el cuidado de la organización en esas regiones.
En resumen, la Administración Trump decidió retirar la demanda contra Southwest Key y suspender sus contratos debido a la reubicación de los menores en otros centros. La organización también enfrentó la congelación de fondos federales y la suspensión temporal de miles de empleados, lo que afectó sus operaciones en los estados donde atendía a los menores migrantes no acompañados.
