24 de abril de 2025 – Washington – EFE.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó este jueves al tribunal federal de Nueva York que planea solicitar la pena de muerte para Luigi Mangione, en caso de que sea hallado culpable del asesinato de Brian Thompson, quien era director ejecutivo de la aseguradora UnitedHealthcare. La decisión fue comunicada de manera oficial y forma parte del proceso legal que se sigue contra el joven acusado.
Los fiscales sostienen que Mangione merece la pena capital por las graves consecuencias emocionales y sociales derivadas del crimen. En particular, destacan el impacto devastador que la muerte de Thompson ha tenido en su entorno cercano, incluyendo su familia, amistades y compañeros de trabajo. Argumentan que la pérdida ha sido significativa y que, por ello, el castigo debe ser ejemplar.
Asimismo, los documentos presentados por el Departamento de Justicia señalan que Mangione, de 26 años, manifestó su deseo de atacar sistemáticamente a una industria entera —la de los seguros de salud— mediante un acto de violencia extrema. Según los fiscales, el crimen no fue un hecho aislado, sino una acción deliberada con motivaciones ideológicas y con el objetivo de generar una respuesta política y social.
La notificación de esta solicitud por parte del gobierno se produjo un día antes de la comparecencia de Mangione ante el tribunal, prevista para el viernes. En esa audiencia, se espera que el acusado se declare no culpable de los cargos federales que se le imputan, entre ellos el de asesinato con arma de fuego, que conlleva como posible sentencia la pena de muerte.
Mangione también enfrenta otras acusaciones relacionadas con el uso de armas y con actos de acoso. Todos estos cargos están vinculados con el asesinato de Brian Thompson, ocurrido el pasado 4 de diciembre en el centro de Nueva York. Según las autoridades, el ataque fue premeditado y ocurrió en un contexto de creciente hostilidad hacia la industria aseguradora por parte del acusado.
Además de los cargos federales, Mangione también debe responder ante la justicia en otros estados. En Manhattan enfrenta once delitos que podrían derivar en cadena perpetua, y en Pensilvania fue capturado tras permanecer prófugo durante cinco días. En ambas jurisdicciones, ha insistido en su inocencia. El caso ha ganado gran notoriedad mediática, en parte por el aspecto físico del acusado y por la simpatía que ha generado entre ciertos sectores críticos del sistema de salud privado en Estados Unidos.