7 de marzo de 2025 – Pekín – EFE.
El Ministerio de Comercio de China informó este sábado sobre la imposición de aranceles a varios productos agrícolas y alimenticios de Canadá, en respuesta a los gravámenes impuestos por Ottawa en octubre pasado sobre los vehículos eléctricos chinos y el acero y aluminio originarios del país asiático.
Los aranceles anunciados por Pekín incluirán un 100 % a productos como el aceite de colza, los guisantes y las tortas prensadas, que son los residuos sólidos derivados de la extracción del aceite de semillas. Estas medidas afectarán a varios productos exportados desde Canadá.
Además, otros productos canadienses como la carne de cerdo y los productos acuáticos estarán sujetos a un arancel del 25 % a partir del 20 de marzo, cuando las nuevas tasas entren en vigor. Estas decisiones incrementan las tensiones comerciales entre los dos países.
Estos aranceles surgen como respuesta a la decisión de Canadá en octubre, cuando Ottawa impuso un arancel del 100 % sobre los vehículos eléctricos provenientes de China, así como un 25 % a las importaciones de acero y aluminio chinos. El Ministerio de Comercio de China calificó estas medidas de “proteccionistas” y “discriminatorias”.
El gobierno chino también acusó a Canadá de ignorar los hechos y las normas establecidas por la Organización Mundial del Comercio (OMC). Además, instó a las autoridades canadienses a reconsiderar su enfoque hacia la cooperación económica bilateral, respetando las normas internacionales y corrigiendo sus políticas.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, justificó estas decisiones comerciales, argumentando que las políticas industriales de China estaban favoreciendo a sus empresas mediante subsidios, lo que afectaba a los competidores occidentales. Este argumento también fue utilizado por otros actores como la Unión Europea, que también impuso aranceles a algunos vehículos eléctricos de marcas chinas.
Tras la imposición de estos aranceles por parte de Canadá, China presentó una demanda ante la OMC, acusando a Ottawa de seguir políticas unilaterales impulsadas por otros países, particularmente Estados Unidos, que también aplicó medidas similares contra los vehículos eléctricos chinos.
Esta escalada de medidas proteccionistas se enmarca dentro de un contexto más amplio de intensificación de la guerra comercial, no solo entre China y Canadá, sino también entre Estados Unidos y sus principales socios comerciales, como Canadá, México y China. Las tensiones comerciales globales siguen en aumento.
