26 de junio de 2025 – Ciudad de México – EFE.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, pidió al Gobierno de Estados Unidos que presente pruebas concretas sobre las acusaciones contra las instituciones financieras mexicanas CI Banco, Intercam y Vector Casa de Bolsa, luego de que fueran señaladas por presunto lavado de dinero relacionado con el narcotráfico. En una conferencia de prensa, afirmó que hasta el momento no existe evidencia sólida que respalde dichas acusaciones.
Sheinbaum fue enfática al declarar que no hay impunidad en México y que si se presentan pruebas reales, se actuará conforme a la ley, sin importar quién esté involucrado. Sin embargo, explicó que no se puede proceder legalmente solo con suposiciones o declaraciones sin sustento, como ocurre en este caso.
La reacción de la mandataria se da tras la inclusión de las tres instituciones en una lista de entidades bajo observación por parte del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, en el marco de nuevas medidas relacionadas con el combate al lavado de dinero y al crimen organizado internacional.
La presidenta mencionó que la Unidad de Inteligencia Financiera y la Secretaría de Hacienda ya habían recibido hace semanas información sobre estas investigaciones, pero señaló que dicha información era muy general y carecía de elementos específicos que justificaran las acusaciones de lavado de dinero.
Según Sheinbaum, las transferencias señaladas por Estados Unidos provienen de operaciones legales entre empresas chinas y mexicanas, en el marco de un intercambio comercial que asciende a 139 mil millones de dólares. Afirmó que muchas de esas empresas están legalmente constituidas y no existe vínculo comprobado con actividades ilícitas.
Aunque las autoridades mexicanas iniciaron una investigación, sólo detectaron faltas administrativas que ya han sido sancionadas. La presidenta reiteró que México está dispuesto a colaborar, pero insistió en que se necesitan pruebas claras para proceder, y que mientras no existan, no se puede hablar de lavado de dinero ni aceptar las acusaciones como válidas.
