6 de junio de 2025 – Ciudad de México – EFE.
En la ciudad de Culiacán, Sinaloa, autoridades mexicanas capturaron a dos presuntos miembros de una organización criminal tras un enfrentamiento armado, en el que también murieron otros dos sujetos. Todos los involucrados estarían vinculados al Cártel del Pacífico, según información oficial. El operativo fue llevado a cabo por elementos de la Fiscalía General de la República, junto con fuerzas de la Marina, el Ejército, la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Durante el despliegue, los agentes incautaron un importante arsenal compuesto por cinco armas largas, dos cortas, cartuchos, cargadores y cinco vehículos. Las autoridades explicaron que atendían un reporte de intercambio de disparos entre grupos armados cuando localizaron a dos personas heridas. Estas recibieron atención médica de inmediato y fueron trasladadas a un hospital cercano.
Mientras los agentes realizaban patrullajes para ubicar a los responsables, fueron atacados a balazos, lo que desató un enfrentamiento. Los oficiales repelieron la agresión y lograron detener a dos individuos, mientras que otros dos agresores murieron en el lugar. Los cuerpos fueron puestos a disposición del Ministerio Público para las diligencias correspondientes.
Las autoridades identificaron a los detenidos y fallecidos como integrantes de la facción conocida como Los Mayos, del Cártel del Pacífico. Esta organización ha sido objeto de operativos recientes en el marco de una estrategia del Gobierno mexicano para frenar el narcotráfico y cumplir compromisos de seguridad asumidos con Estados Unidos.
Desde septiembre de 2024, el Cártel de Sinaloa enfrenta una intensa disputa interna, especialmente entre las facciones de Los Chapitos y Los Mayos. La situación se agravó luego de la captura de Ismael “El Mayo” Zambada, que según reportes fue entregado por Joaquín Guzmán López a las autoridades estadounidenses. Esto ha generado tensiones y un aumento significativo de la violencia.
La confrontación interna ha dejado más de 1.000 muertos en Sinaloa desde septiembre. Washington, que ya declaró al Cártel de Sinaloa como grupo terrorista, sigue de cerca el conflicto, mientras las fuerzas de seguridad mexicanas intensifican sus acciones para controlar la situación y desarticular las estructuras criminales.