14 de agosto de 2025 – Tapachula (México) – EFE.
Trabajadores jubilados de la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) han iniciado un cierre indefinido de una Terminal de Almacenamiento y Distribución (TAD) en Tapachula, Chiapas, en protesta por la falta de servicios médicos. Esta situación, que se prolonga desde hace un año, ha generado un desabasto de combustible en los 16 municipios de la frontera con Guatemala.
La escasez de gasolina en la región comenzó el pasado lunes, lo que ha provocado compras de pánico y largas filas en las estaciones de servicio. Las ciudades más afectadas son Tapachula y Cacahoatán, donde algunas gasolineras han agotado sus existencias, mientras que otras operan con horarios reducidos.
El desabasto ha generado un caos en las estaciones, donde la situación podría empeorar. Los ciudadanos se ven obligados a esperar hasta dos horas y media para poder comprar unos pocos litros de combustible, todo ello bajo las altas temperaturas de la región. Otros municipios afectados incluyen Tuxtla Chico, Ciudad Hidalgo, Tuzantán, Mapastepec, Huixtla, Acacoyagua, Villa Comaltitlán, Acapetahua y Motozintla.
Daniel Avendaño Castillo, un jubilado, explicó que el cierre de la planta es una medida de presión para exigir la restitución completa de los servicios médicos. Los jubilados demandan que se incluyan nuevamente los servicios de laboratorios, radiografías y la atención de médicos especialistas, que les fueron retirados gradualmente. Su principal petición es el restablecimiento total de estos servicios.
Los jubilados han dejado claro que no permitirán la entrada ni la salida de camiones cisterna de la planta, aunque sí permitirán el paso de los trabajadores. Han solicitado la intervención de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum. Por su parte, la presidenta ha declarado que el problema “se va a resolver” y que la escasez no se debe a la falta de combustible, sino a un problema con los contratos de los distribuidores, por lo que la Secretaría de Energía intervendrá para solucionar la situación.
La problemática ha generado críticas desde el sector empresarial. Abel Ruiz Méndez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en Tapachula, ha pedido al director de Pemex que resuelva el problema, ya que está afectando a la industria, el comercio y el transporte. Ruiz Méndez enfatizó que, aunque los jubilados tienen derecho a luchar por sus peticiones, no deberían afectar a terceros ni a la economía de la ciudadanía.