11 de abril de 2025 – Tuxtla Gutiérrez (México) – EFE.
Cada semana llegan a Chiapas, en la frontera sur de México, cientos de migrantes deportados por la nueva Administración de Estados Unidos en vuelos comerciales. Ante este flujo constante, el Gobierno estatal ha puesto en marcha un programa de inserción laboral y apoyo al emprendimiento, con el objetivo de ofrecerles una alternativa para rehacer su vida en el país.
Pablo Aguilar, director de Trabajo y Previsión Social de Chiapas, explicó que muchos de estos migrantes quedan varados en el sur de México, recurriendo a empleos informales. Por ello, las autoridades han tomado medidas para integrarlos a empresas locales o impulsar sus propios proyectos mediante capacitaciones y bolsas de empleo que se adaptan a sus habilidades.
México ha recibido más de 24.000 personas deportadas durante las primeras semanas del nuevo gobierno estadounidense, incluidos miles de extranjeros. La presidenta Claudia Sheinbaum ha prometido apoyo a quienes decidan quedarse. En Chiapas, ciudades como Tapachula, Comitán y Tuxtla Gutiérrez son puntos clave del plan laboral debido al alto número de vuelos que traen deportados.
Aguilar indicó que, solo en la última semana, atendieron a cerca de 200 migrantes, de los cuales más de 80 ya fueron colocados en trabajos dentro de empresas chiapanecas. Esto refleja una respuesta activa por parte del Gobierno para integrar a estas personas de forma digna en el mercado laboral.
Las políticas migratorias de Donald Trump, como las deportaciones masivas, el despliegue militar en la frontera y la eliminación de la app ‘CBP One’ han desmotivado a muchos migrantes. Particularmente, los venezolanos —una parte importante de la migración irregular en México— se han visto obligados a cambiar sus planes y permanecer en el país.
Algunos, como Paul Carrillo, han transformado esa situación en una oportunidad. Junto a otros venezolanos, abrió un restaurante en Tuxtla Gutiérrez llamado ‘Rincón de Venezuela’, donde ofrecen platos típicos como arepas, tequeños y empanadas. Asegura que encontraron en México un hogar inesperado y agradece la calidez de la comunidad chiapaneca.
También Carmen Galicia, su compatriota, celebra el éxito de su negocio. Para ella, emprender no solo ha sido una fuente de ingresos, sino también una forma de integrarse. Por su parte, Aguilar subrayó que migrantes con experiencia laboral en Estados Unidos logran emplearse en sectores como turismo, agricultura y supermercados, siempre con garantía de derechos laborales.