5 de agosto de 2025 – Washington – EFE.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha señalado este martes que el vicepresidente, JD Vance, es “probablemente” el candidato más adecuado para sucederlo como líder del Partido Republicano en las elecciones presidenciales de 2028. Esta declaración sugiere un claro favoritismo por parte del actual presidente, quien ve en su vicepresidente al posible futuro abanderado de la formación política.
En sus comentarios a la prensa en la Casa Blanca, Trump no descartó a otros miembros de su equipo como posibles contendientes. Específicamente, mencionó que Vance podría hacer equipo con el secretario de Estado, Marco Rubio. Estas palabras sugieren que Trump no solo está pensando en un sucesor, sino también en una posible fórmula de liderazgo para las próximas elecciones, aunque aún de manera muy incipiente.
El presidente se mostró optimista sobre el desempeño de su gabinete y señaló que hay muchas personas competentes. A pesar de que la carrera presidencial de 2028 aún está lejos, Trump expresó que Vance está haciendo un “gran trabajo” y que, en este momento, sería el “favorito” para obtener la nominación republicana. Estas declaraciones sirven para impulsar la figura de su vicepresidente ante la opinión pública y dentro del partido.
No es la primera vez que Trump menciona a Vance y Rubio como posibles sucesores. Sin embargo, en esta ocasión, su respaldo a Vance fue más directo. Por su parte, Marco Rubio ha respondido a estas insinuaciones de manera estratégica. En una entrevista reciente, el secretario de Estado afirmó que apoyaría al vicepresidente si este decide postularse para la nominación republicana, lo que podría indicar una posible alianza entre ambos líderes en el futuro.
Las declaraciones de Trump se producen en un momento en que la especulación sobre el futuro del Partido Republicano comienza a tomar fuerza. Al designar a Vance como el candidato “probable”, Trump busca consolidar su influencia y dejar claro quién considera que es el mejor posicionado para continuar con su legado político y llevar adelante las políticas de su administración en un futuro mandato.
A pesar de que el presidente ha reconocido que es “demasiado pronto” para hablar de este tema con total certeza, su opinión ya ha puesto a JD Vance en el centro de la conversación política. El respaldo de Trump, un factor de peso dentro del Partido Republicano, posiciona al vicepresidente en una situación ventajosa frente a otros posibles contendientes y establece el tono para la futura contienda por la nominación presidencial.