4 de noviembre de 2025 – Arlington (EE.UU.) – EFE.
Los residentes de Virginia acuden a las urnas este martes en una jornada electoral en la que se elegirá a la primera mujer gobernadora del estado. Esta votación se lleva a cabo en un ambiente de considerable preocupación debido al cierre del Gobierno federal de Estados Unidos, una situación que está a punto de convertirse en el más prolongado de la historia del país y que tiene un impacto particularmente significativo en Virginia. Jim, un empleado federal retirado, ha abierto su casa en Arlington, cerca de Washington, D.C., para recibir a voluntarios del partido demócrata que buscan motivar a los ciudadanos a votar antes de que se conozca si la demócrata Abigail Spanberger ó la republicana Winsome Earle-Sears será la próxima gobernadora.
Esta elección es una de varias que tienen lugar en Estados Unidos este martes, que incluyen también comicios para la alcaldía en ciudades como Nueva York y Miami, además de un referéndum en California para modificar los distritos electorales. El primero en llegar a la casa de Jim puntualmente a las nueve de la mañana es Daniel Jenkins, un joven que trabaja como becario en el Congreso. El cierre del Gobierno federal le ha proporcionado tiempo libre, el cual está aprovechando para sumarse a las labores de voluntariado.
Jenkins lamenta ser uno de los empleados que no recibió su primer cheque de pago a finales del mes anterior, una situación que lo impulsó a salir a la calle para buscar votantes de puerta en puerta. El joven considera que las encuestas sugieren que la mayoría de los votantes responsabilizan a los republicanos por la paralización del Gobierno, y cree que esto tendrá una repercusión en la votación, dado que muchos habitantes de Virginia son trabajadores federales y se encuentran desempleados y sin remuneración.
Poco después de Jenkins, llega Amy, otra trabajadora gubernamental ya jubilada que está participando por primera vez en la actividad conocida como “canvassing” en Estados Unidos, que consiste en hacer campaña y contactar a electores de manera directa. Amy recordó que, al ser este un estado fronterizo con la capital federal, muchas personas se ven afectadas por el cierre. Sin embargo, advirtió que la zona del norte de Virginia es una especie de “burbuja demócrata” que podría no reflejar el sentir general de toda la región.
No obstante, el resultado de estas elecciones podría ofrecer una indicación clara de la dirección que tomará la confrontación política entre demócratas y republicanos respecto al cierre del Gobierno. La paralización alcanza hoy su trigésimo quinto día, igualando el récord establecido en 2018 durante la primera administración de Donald Trump. Virginia, que en ocasiones se ha considerado un estado indeciso, podría funcionar como un indicador de la opinión pública de cara a las elecciones de medio término de 2026, en las que se renovará la Cámara de Representantes y una parte del Senado estadounidense.
Virginia hará historia al elegir a su primera mujer gobernadora. El actual gobernador, el republicano Glenn Youngkin, ganó por un margen estrecho en 2021, pero la ley estatal le impide buscar un segundo mandato consecutivo. La contienda actual es entre dos mujeres, la demócrata Spanberger y la vicegobernadora republicana Earle-Sears, aunque las encuestas más recientes muestran una ventaja considerable para la candidata demócrata. Jim expresó su entusiasmo ante la perspectiva de que Virginia tenga a su primera gobernadora, afirmando que “hoy haremos historia”. Elisabeth, al salir de un centro de votación, celebró el hito, pero aclaró: “No voto por ella porque sea mujer, sino porque es buena”.
Algunos votantes también han opinado sobre la decisión del presidente Donald Trump de no mostrar un apoyo explícito a la candidata republicana, aunque sí respaldó al aspirante a fiscal general, Jason Miyares. Jim teorizó que la falta de apoyo de Trump podría deberse a que no quiere asociarse con una potencial perdedora, pero también sugirió que él tiene una preferencia por “rubias blancas y hombres”.
