20 de octubre de 2025 – Washington – EFE.
Las obras destinadas a la construcción del salón de baile, un proyecto impulsado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca, se iniciaron este lunes con la demolición de una sección de la residencia presidencial. Esto contradice las declaraciones previas del mandatario, quien había asegurado que la nueva edificación sería simplemente un anexo y no alteraría la estructura original del histórico inmueble.
Corresponsales de prensa divulgaron las primeras fotografías que mostraban maquinaria de demolición trabajando en el Ala Este de la sede del poder ejecutivo estadounidense. Estas imágenes confirmaron el inicio de los trabajos de construcción.
Hace algunas semanas, la Administración Trump había emitido un comunicado indicando que la nueva instalación estaría “sustancialmente separada” del edificio principal. No obstante, los periodistas presentes hoy en el lugar pudieron verificar que, en efecto, la estructura original de la Casa Blanca sufrirá modificaciones como parte del proyecto.
Un funcionario de la Casa Blanca, que prefirió mantenerse en el anonimato, confirmó al diario The Washington Post que los trabajos de demolición observados hoy están directamente relacionados con la construcción del salón de baile y que este reemplazará por completo el Ala Este de la residencia.
Según los detalles proporcionados por Trump a la cadena NBC la semana pasada, el salón de baile tendrá una considerable extensión de aproximadamente 8,000 metros cuadrados y podrá albergar hasta 900 invitados simultáneamente.
El coste estimado de este ambicioso proyecto asciende a doscientos millones de dólares. La Casa Blanca ha especificado que esta cifra será cubierta mediante donaciones realizadas tanto por el propio presidente como por otros “patriotas” que han decidido contribuir.
La empresa constructora responsable de ejecutar las obras es Clark, una compañía con sede en Virginia. Esta firma tiene en su historial proyectos significativos en la capital del país, como el estadio Capital One Arena y el complejo L’Enfant Plaza. Por otro lado, la compañía McCrery Architects fue seleccionada para el diseño del salón, asegurando que el nuevo recinto mantendrá el estilo neoclásico estadounidense predominante en la Casa Blanca.
