17 de junio de 2025 – Austin (EE.UU.) – EFE.
El Gobierno de Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, envió 700 militares a los estados de Florida, Texas y Luisiana para apoyar las operaciones relacionadas con el control migratorio, según informó el Pentágono. Estos soldados proporcionarán apoyo logístico y realizarán tareas administrativas vinculadas con el procesamiento de migrantes indocumentados en centros de detención, sin involucrarse en labores de seguridad pública.
Esta decisión se anunció en medio de una serie de protestas nacionales contra las políticas migratorias del presidente y el aumento de arrestos de inmigrantes. Las manifestaciones comenzaron en Los Ángeles, donde, aunque la mayoría fue pacífica, se registraron algunos enfrentamientos entre manifestantes y la policía.
En respuesta, Trump ordenó el despliegue de tropas militares y miembros de la Guardia Nacional, aunque la presencia de estos últimos en California se realizó en contra de la voluntad del gobernador demócrata Gavin Newsom. Newsom ha expresado su rechazo a la militarización en su estado, y el fiscal general de California presentó una demanda contra el gobierno federal, acusándolo de abuso de poder.
Un tribunal ordenó que la Guardia Nacional regresara bajo control estatal en California, pero una corte de apelaciones suspendió temporalmente esta orden mientras se revisan más argumentos del caso. La disputa legal continúa en medio de la tensión política por la militarización en el estado.
Por otro lado, los estados de Texas, Florida y Luisiana cuentan con gobernadores republicanos que apoyan estas acciones. Por ejemplo, el gobernador de Texas, Greg Abbott, había solicitado previamente el despliegue de la Guardia Nacional para anticipar posibles protestas.
Las protestas en Texas, que se desarrollaron en ciudades como Houston, Dallas, San Antonio y Austin, transcurrieron mayormente en calma, aunque hubo momentos aislados de tensión entre los manifestantes y las autoridades, sin que se registraran enfrentamientos graves.
