19 de agosto de 2025 – Washington – EFE.
Karoline Leavitt, vocera de la Casa Blanca, declaró este martes que Estados Unidos está listo para utilizar “todo su poder” con el objetivo de detener el flujo de narcóticos que ingresan al país. Esta afirmación se produjo en respuesta a preguntas sobre el despliegue de tres barcos de guerra y 4,000 soldados en aguas del Caribe, cerca de Venezuela.
Al ser consultada sobre el envío de estas tropas, Leavitt explicó en una conferencia de prensa que el presidente Donald Trump está decidido a frenar el narcotráfico y a llevar a los responsables ante la justicia.
Leavitt reiteró la postura de la administración de que el gobierno de Nicolás Maduro no es legítimo, sino un “cartel del narcotráfico”. Señaló que, según la opinión de su gobierno, Maduro es un líder de este grupo criminal, acusado en Estados Unidos de tráfico de drogas.
El viernes anterior, CNN, citando a fuentes de defensa, informó sobre la presencia de la marina estadounidense en el Caribe. El objetivo de esta misión es combatir a los carteles de la droga y fortalecer la presencia militar de EE. UU. con el uso de aviones, barcos y lanzamisiles.
Tras el despliegue de los más de 4,000 militares, el gobierno de Cuba criticó la acción, calificándola de parte de una “agenda corrupta” del secretario de Estado, Marco Rubio, y solicitó que se respete la región como una “zona de paz”.
La misión de vigilancia incluye varios recursos militares significativos, como un submarino nuclear, aviones de reconocimiento P8 Poseidon, destructores y una nave de guerra equipada con misiles.
Hace unos meses se divulgó una carta del secretario de Defensa, Pete Hegseth, en la que se ampliaban las funciones del ejército estadounidense. En ella, Hegseth establecía que la misión de las fuerzas armadas no solo es defender la patria, sino también “sellar las fronteras y repeler toda forma de invasión”, incluyendo el narcotráfico, el contrabando de personas y otras actividades delictivas.